Marrying Mr. Arrogant [Sin Editar]

Capitulo 11 : El viaje

Estaba sentada en el sofá del salón, Alaska insistió en quedarse conmigo pero le dije que fuese a clases. Necesitaba estar sola me sentía estúpida por creer que entre Noah y yo podía haber algo. Pero después de lo de esta mañana me queda claro que no.

El asunto de Patrick me tenia asustada, realmente le creía capaz de todo. En ese momento pasaron muchas cosas por mi cabeza, pensé que iba a golpearme aunque termino haciéndolo indirectamente. Lo peor es que el muy idiota se largo dejándome allí, era un cobarde y por mas ganas que tuviese de vengarme... el había logrado su objetivo, asustarme.

-Que la tiene tan pensativa- interrumpió Sophia sacándome de mis pensamientos.

-Sabes... todo esto es muy loco no? es increíble que en poco tiempo todo haya cambiado- mencione llevándome mis manos hacia el rostro.

-Es normal que te sientas así, apenas tienes 17 años y ya has asumido una responsabilidad tan grande como el casamiento- recalcó con una mirada tierna.

-Si y ademas me tengo que ir de aquí, siento como si me estuviese echando- puse los ojos  en blanco.

-Estoy segura que todo ira bien, ademas tu y Noah...-rió apartando la mirada.

-El y yo que?- pregunte curiosa.

-La otra noche os vi...- dijo nerviosa.

No pude evitar sonrojarme, sabia a lo que se estaba refiriendo y me moría de la vergüenza- No ocurre nada entre nosotros, si existía alguna posibilidad ya no existe- declare.

-Aun sois muy pequeños para entender muchas cosas de la vida- añadió.

La observe extrañada cuando una melodía comenzó a sonar. ¿Quien me llamaría ahora mismo?, mire la pantalla del móvil y era él.

-Que demonios quieres Noah?

-Estas en tu casa? estoy en la puerta ábreme- sentencio y colgar sin esperar respuesta.

Genial hablando del rey de roma y él que se asoma. Me levante del sofá para ir hacia la puerta, pero antes de abrir me quede unos segundos pensando. Gire sobre mis pies regresando a mi lugar pero el tenia razón teníamos que hablar, nos íbamos en 2 días y no podíamos simplemente dejarlo pasar. Fui de nuevo hacia la puerta para abrirle, él ni siquiera me miro simplemente entro mirando hacia los lados.

-Hola madison como estas- le dije imitando su voz.

Se giro hacia mi fulminándome con la mirada- ¿estamos solos entonces?- pregunto.

-Esta sophia, pero bueno que quieres- exclame cruzándome de brazos.

Nos vamos mañana por la tarde, surgió una cosa y necesito volver- dijo sentándose en el sofá  colocando sus manos sobre sus rodillas- Solo quiero dejar las cosas claras de lo que sera nuestra vida en Seattle. Nadie debe enterarse que estamos casados, podemos hacer de nuestras vidas lo que queramos sin necesidad de dar explicaciones el uno con el otro. No importa si quieres seguir con tu ex o lo que sea, con que no lo vean mis padres todo bien.

-No sabes lo que dices- interrumpí- y tranquilo que yo tampoco quiero que nadie se entere de esto, con suerte y en un tiempo podre divorciarme de ti. Nadie va a poderme reprochar nada no?- tenia ganas de llorar pero no iba a dejar que me viese así- podre decir que lo intentamos y no funciono- sonreí sarcásticamente.

 -Lo digo porque no quiero que malinterpretes lo de la otra noche, íbamos borrachos.

Trague saliva necesitaba controlarme o iba a matarlo, cada palabra que decía quemaba nose si se estaba dando cuenta lo idiota que estaba siendo- Vamos a fingir delante de nuestros padres que todo esta bien pero tu y yo no somos nada- escupí las palabras con tanta rabia hacia el que mi mirada ardía.