TURN ON JENNIE - JENSOO

𝙰𝙲𝙰𝙼𝙿𝙰𝙳𝙰

––Esta programado, tendrá que salir el viernes por la noche –– Mi asistente se detiene en la esquina de mi escritorio. –– Ya eh reservado en el hotel y sus pasajes están pagados, la señorita Park esta igualmente enterada.

––Gracias, puedes retirarte –– Le digo de manera mecánica.

Me sobaba las sienes fatigada y rápidamente estresada, a Jennie no le hará mucha gracia, no justo ahora que le había prometido toda una semana al aire libre, yo estaba preparada para una mágica y bien planeada semana, miraríamos las estrellas, luego desayunaríamos en las orillas más tranquilas y pueblerinas, a continuación le profesaría mi amor todo el tiempo que pudiera sin ninguna reserva.

Eh estado al tanto de su creciente ansiedad por sus propios asuntos de trabajo, mirando hacía la semana pasada; nos era difícil estar una al lado de la otra, sobre todo ella que sintiéndose muy culpable por según ella abandonarme, me llenaba de mimos las pocas horas que se encontraba como grietas en su agenda.

––Te he abandonado mucho tiempo, eh terminado con lo nuevo, pasemos toda una semana juntas ¿Quieres, Cariño? –– Yo sí que entendía su falta de presencia, llegaba a casa y no encontraba nada, tan solo me desvelaba esperándola y ella a pesar de estar cansada me sonreía y me besaba.

Ella también será comprensiva conmigo, se decepcionara pero ella entenderá, pero no quiero desplomarle la emoción tan genuina que albergaba todos los días por la promesa de mi "Si quiero, pasaremos todos los días que quedan al termino del mes". Ahora sería yo quien no estuviera ahí cuando ella llegara a casa, es muy sensible y seguro ya puedo escucharla, mencionando que pude haberlo retrasado, movido o incluso cancelado, tal cual ella había hecho con lo suyo. Pero este negocio también es importante, ella lo es, todo es importante.

––Que difícil es ser yo –– Me digo, pero entonces una bombilla se ha encendido. Sí que puedo cumplirlo, mi partida es el viernes y todo el resto de semana podría aprovecharlo a su lado, podría llenarla tanto de ternura que soltaría la bomba de mi viaje y ella lo entendería. Ella ya estaría feliz porque eh cumplido y yo me iré relajada y satisfecha, entonces el sábado será solo es pestañeo.

––Señorita Jisoo, la llaman por la línea 2

––Ahora no puedo Lilian –– La interrumpo y ella no habla más

––Pero señorita...

––Ahora no, ahora no, cancela todo, pásalo para la siguiente semana y lo que sea más urgente envíamelo enseguida.

Así lo hizo y fueron horas eternas, cuando lentamente los asuntos pendientes iban desapareciendo fue tarde tras las ventanas, ahora mi vista se esforzaba y las sombras en las esquinas poco a poco se acentuaban, Jennie no me había llamado ni una sola vez y me descoloque, había sido yo quien no le había devuelto los mensajes desde la mañana, un cariñoso "¿Llegaste bien, mi amor?" y otros seguidos preocupándose por mi alimentación, o mi hora de salida retrasada, después no hubo más y una sensación de alarma me inundo, ahora más que nunca debía de consentirla; fue apresurado que ignore los mensajes sin ver remitentes y ahora Jennie me esperaría preocupada. Era hora de irme.

––Lilian, ya puedes retirarte, nos vemos la próxima semana, los detalles los solucionamos por llamada. –– Parecía querer decirme algo pero se abstuvo. Lo ignoré, quería llegar a casa.

Fue una llegada rápida, en cuanto las llantas pisaron el pavimento de la entrada, respire aliviada y un tanto miedosa, en ocasiones como esta sabía que estaba enamorada de un gatito histérico. Debía de colocarle un tono personalizado para la próxima. No entre con las manos vacías, ¿Qué cosa no arregla la comida?, camine y entre con precaución y la encontré: