Luces de la calle (Jori)

25

| Jade |

El Karaoke Dokie cierra a las respetables 9 p. m., porque después de todo es para estudiantes de secundaria, y no estamos en la edad en que la fiesta toda la noche es aceptable, a pesar de que los niños simplemente se van a otro lugar y continúan su fiesta allí. El grupo y yo nos quedamos hasta que los empleados prácticamente nos empujan por la puerta. Tori y Cat hicieron otra canción, incluso Andre, pero pasamos la mayor parte del tiempo bailando y comiendo alitas de pollo y bebiendo demasiados refrescos. Por parecer una pequeña flor tan prístina e inocente, Tori baila como un maldito demonio, no es que me queje. He llegado a disfrutar de sus habilidades de baile extrañamente eróticas. Sin embargo, debería haberlo sospechado: debe ser lo hispano en ella, porque tiene algunas caderas de salsa.

Pensar en ella de esa manera todavía es nuevo para mí: no como una enemiga, no como una amiga, no como una amiga cercana, sino como mi novia, como alguien a quien beso, toco y coqueteo y alguien que me excita. . Y esas cosas Es raro. No desagradable, pero extraño, no obstante.

Cuando estamos afuera, Tori salta hacia las puertas y suplica usar el baño, incluso se toca las rodillas y da un pequeño rebote para convencer al guardia de seguridad de que abra el edificio y la deje entrar. Suspirando, tira de la puerta. abre y la hace entrar. Gritando que regresará enseguida, me sonríe antes de desaparecer, dejándome solo, bueno, con un montón de personas que tolero levemente y la hermana de Tori, así que, sí, solo. Mis botas hacen clic en el asfalto mientras me dirijo al auto. Cuando el sol se ha ido, el cielo es de un profundo tono índigo, sin estrellas: la abundancia de luces las ahoga por completo, pero la luna es un penacho blanco en la distancia.

Agrupados detrás de mí están Andre, Cat, Robbie, Trina y Beck, que ha hecho poco más que pucheros desde que aparecimos Tori y yo, pero no empañaron nuestro buen tiempo. Por mucho que quiera ser su amigo, y realmente lo quiero, ni siquiera puedo dejar que mis ojos permanezcan en él por mucho tiempo sin que mi pecho se sienta pesado. Uno pensaría que después de un mes y encontrarse en una relación con otra persona al menos vendaría las heridas de una ruptura, pero tres años de amar a alguien no desaparecen. Cruzo los brazos con fuerza sobre mi pecho y cierro los ojos, dejando que mi cadera descanse contra la puerta del auto. Me odio a mí mismo por dejar que me afecte de esta manera cuando pasó hace tanto tiempo, especialmente después de todo lo que pasó desde entonces. Tori, es decir, quien ha sido mi faro de luz a través de todo esto, y ha confiado en mí. Confío en ella más que en nadie, más de lo que confié en Beck, que es decir algo y significa algo. Entonces, ¿por qué no puedo olvidarlo ya?

Un ruido de tacones detrás de mí me alarma de que alguien se acerca, así que me compongo y me doy la vuelta. Trina se pavonea delante del grupo, con los ojos fijos en mí como una leona a punto de saltar, y entrecerro la mirada hacia ella desafiante. Entiendo que salir con Tori es un paquete completo: tengo que ponerme con Trina, a pesar de saber que es una tonta egoísta y engreída. Todavía no tiene que gustarme, sin embargo.

"Oye", dice Trina mientras viene a mi lado. El resto de mis amigos se reúnen al otro lado del auto para despedirse, ya que parece que Robbie y Beck se están despidiendo ahora en lugar de esperar a Tori. No hay sorpresa allí. Beck me mira por un instante antes de darme la espalda y alejarse. Sacudo la cabeza y vuelvo a concentrarme en Trina.

Le doy un empujón con mis labios, mi forma de sonreír sin tener que comprometerme con ningún sentimiento real, e inclino la cabeza hacia adelante en reconocimiento. No digo nada porque no tengo nada que decir, y llenar el espacio entre nosotros con palabras vacías se sentiría mucho peor de mi parte que simplemente ignorarla por completo. Trina parece tener un plan, sin embargo, y descarta mi rechazo no verbal poniendo las manos en las caderas y sacando la cara.

"Así que estás saliendo con mi hermana". Los ojos de Trina están tan entrecerrados que no puedo ver sus ojos, y su expresión es tan grave y seria que casi me río en su cara.