6.

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Capítulo 6.

-¿Qué fue lo que sucedió?- la directora estaba en
su escritorio, frente a nosotros.

El silencio inundaba el lugar ya que nadie se atrevía
a hablar.

Nunew sostenía mi mano a pesar de las malas miradas de los demás.

-Es la última vez que lo pregunto...

-Estaban teniendo relaciones, directora- habló uno de los chicos. La mujer abrió sus ojos de par en
par y nos miró directamente, desviando disimuladamente su mirada a nuestras manos.

Nunew la apretó aún más.

-Eso no es cierto- reaccioné completamente a la
defensiva- Nosotros somos amigos y acostumbramos a dormir juntos desde pequeños- Esa era la verdad y no había nada de malo en eso.

-Yo escuché como lo hacían- dijo Mix  con repulsión.

-Nosotros no estábamos haciendo esas cosas- habló Nunew con la voz ahogada por la impotencia.

La mujer suspiró.

-Yo sé lo que sucede aquí, chicos- todos la miramos atentos- Nunew y Zee, ustedes siempre han estado juntos y eso es algo admirable. Pero las cosas cambian, ustedes ya no son niños- fruncí el ceño.- No sabía a qué iba todo eso ustedes ¿Cómo decirlo? Ahora, buscan o les interesa explorar nuevas cosas. Pero no deben olvidar que son amigos desde pequeños, los chicos a su edad suelen confundir y no separar las cosas.

-Nosotros no somos homosexuales- aclaré.

Nunew soltó mi mano y agachó la mirada.

-No digo que lo sean. Pero quizás estén algo
confundidos.

Me quedé pasmado ¿Cómo era posible tanta
estupidez? ¿Enserio que no le importa mis hematomas de mi rostro pero si aquella estupidez?

-¿Usted está escuchando?- hablé de golpe, estaba
muy enfadado -le estamos aclarando la situación.
Usted puede regañar y castigar a estos pelmasos
por golpearnos ¿Y lo único que hace es decir esa
estupidez?

-Baja ese tono, Zee Pruk- ordenó, no era la
primera vez que enfrentaba a la directora. Nunca
tuve miedo en decir las cosas y menos cuando algo
me tocaba los huevos.

-no lo haré hasta que entienda lo que sucede aquí,
nosotros somos amigos, ellos son unos orangutanes
y usted una tonta.

La mujer abrió más los ojos.

-¡Siempre has sido un problema! - se levantó de su escritorio y se inclinó hacia mi- Nunew a sido
uno de los mejores estudiantes y chicos del orfanato no dejaré que lo corrompas de esta manera.

Me levanté imitando su acción y semblante.

-Pues puede irse a la mismísima mierda- pronuncie lentamente aquellas palabras y nos miramos desafiantes.

Y es así como me castigaron por tres meses,
prohibiendome salir al patio y cambiándome de
habitación para estar lejos de Nunew.

Me prohibieron acercarme a él. Y al parecer todos
sabían de los rumores, alumnos, profesores,
inspectores, cocineras y tutoras.

"Pruk Panich es homosexual y se aprovechó del
inocente Nunew"

"Zee es un maricon"

"Nunew pidió ayuda y los demás golpearon a Zee"

Ya cada vez me importaba menos lo que pensaran o
dijeran. solo quería volver a estar cerca de de él.

En clases los profesores estaban atentos y alerta a
nosotros para que no nos acercaremos. Muchas
veces regañaron a Nunew por tratar de hablar
conmigo.

Todo fue una mierda.

Ya había pasado un mes y ese infierno seguía
creciendo. Lo que se interponía entre nosotros era
la distancia, porque nunca dejábamos de mirarnos
o dedicarnos pequeñas sonrisas.

Siempre antes de dormir miraba mi reflejo. Mis
hematomas desaparecían cada día más, en cambio
mis ojeras crecían. estaba al igual que Nunew.

Ambos no la estábamos pasando bien.

Ya habían pasado dos meses y el cumpleaños de Nunew se acercaba.

Había hecho una linda flor de papel, el problema
era cómo entregársela. Afirme mi cabeza con mi
manos, apoyando los codos en el escritorio. Ni
siquiera podría desearle un feliz cumpleaños.

Muchas veces quise mandar todo a la mierda e ir a
visitarlo por las noches.

Pero era muy arriesgado, podría empeorar la
situación y aumentar los rumores.

Solo me quedaba hasta tarde escribiendo poemas
que jamás llegarían a el.

Alles. -ZeeNunewDonde viven las historias. Descúbrelo ahora