Alles. -ZeeNunew

24.

Capítulo 24.

-Tienes que dejar de lastimarte

-Pero es que yo siento todo tan profundamente si
se trata de el

-Lo sé, pero la muerte es algo que nadie se salva. El tiene que llorar, tiene que sufrir porque es inevitable

-Sufrir...- repetí con una sonrisa fingida - Eso fue lo que aprendimos ambos en nuestra jodida vida

-No fue lo único que aprendieron, la vida es difícil y eso el claro, pero si no lo fuera no podríamos disfrutar lo bueno que tenemos

-Nunew no está Earth, el ahora. - buscaba las
palabras - Es como si viviera en otro mundo,
totalmente diferente al que compartimos cuando pequeños. El ya no está

-Él está ahí, esperándote una vida entera. El no está porque no has sido lo suficientemente valiente para ir ¿No crees que es injusto para Nunew? ¿Que crees que el haría si estuviera en tu posición?

-Lo sé- agache mi cabeza -pero me aterra pensar en lo que puede pasar y que las cosas no salgan como planeo, o como todos esperamos que sea

-Zee mirame- obedecí, Earth colocó su mano
encima de la mía - El tiempo sigue avanzando y
aunque estés muriendo de miedo, aunque después sientas que lo perdiste todo. por lo menos será definitivo, si no vas con Nunew ahora te arrepentirás toda tu vida y eso ahora te está matando

Era arriesgarse. De dos maneras podía morir:
siendo rechazado o no acercarme y verlo de lejos. Y solo había una manera de no morir.

-Tu... ¿Tú crees que si voy donde el ahora se
mejore?- Earth me mostró una sonrisa sincera

-Claro, tú serás su remedio- infle mis mejillas y
exhale cansado -no lo pienses mucho y ve con él
-yo... no me siento preparado

-Tienes miedo. Si tienes miedo a intentarlo, es
porque lo estás deseando- agache mi mirada -el
miedo te indica, claramente, que debes hacerlo

-Lo deseo- afirme -el con solo una sonrisa le
daba color a mi vida, lo quiero de vuelta

-¿Que esperas? - rió --su padre murió, no
necesita a Akk, no necesita a sus amigos de ahora, te necesita a ti

-Iré- asentí - Él me necesita- me levanté y sentí
mis piernas temblar, mire a Earth asustado

-No digas gracias- sus ojos brillaban - Ve con Nunew.

Limpie mis lágrimas y comencé a caminar en
dirección al cementerio. No estaba seguro de lo que estaba haciendo o lo que iba a hacer, pero nada me detendría.

Mi corazón se comenzó a acelerar a medida que me acercaba. Cuando ya había entrado al cementerio caminé rápidamente hacia el entierro pero al llegar ya nadie se encontraba ahí.

Comencé a correr hacia la segunda salida, de
seguro se fueron por ahí. Corrí pasando por un
jardín que desconocía del cementerio, doble por el camino en los que habían unos frondosos arbustos que el viento hacía sonar.

Al doblar me detuve en seco al ver a Nunew besando a Akk, Nunew sosteniendo su mandíbula, ambos con los ojos cerrados. Sentí que el mundo se me venía encima, matando cada parte de mi.

Tardar 8 años en llegar no hubiese sido llegar
tarde, pero justo en ese momento lo fue. Retrocedi y me devolví de por dónde venía, con la mente totalmente en blanco. No saber que pensar al respecto me hacía desesperar ¿Acaso esto tenía alguna explicación? ¿O al menos alguna excusa? Desarmarme a pedasos, eso sentía mientras daba cada paso por la acera.

Finalmente llegué a casa, irónicamente mi alma se había perdido en ese cementerio.

Mi llanto reventó cuando me tiré a la cama, con mi mano tape mi boca para no hacer ruido, mis
lágrimas corrían por mis mejillas hasta caer a la almohada, mientras mi corazón se rompía pensaba en esa imagen grabada en mi mente, mi otra mano estaba en mi pecho debido al dolor que me ardía.

Yo sabía que era imposible, pero soñé con un final feliz

-Eres un estúpido- murmuraba a mi mismo entre lágrimas -Un imbécil! ¡Una mierda! ¡Eres un puto desastre!

Me levanté de la cama sin saber qué hacer, la
ansiedad no me dejaba razonar. Mi teléfono no
dejaba de vibrar, en la iluminada pantalla podía ver el nombre de Earth. No, no quería saber de nadie y tampoco quería que supieran de mí. Apague el teléfono.

Había una tercera opción para morir; ser reemplazado.

Caminé hasta la habitación de Akk y comencé
a guardar toda su pertenencias en su maleta, le
haría el favor de irse a la mierda.