35.

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Capítulo 35.




-¡¿Porque me haces esto?! - los gritos de la mujer resonaban en el eco de la pequeña casa -¡Tu siempre me has odiado!

-Puedes hacer la rabieta que quieras, no te colaras más la piel con esa mierda-- ella pego un grito y comenzó a golpear el pecho de Mark repetida veces con sus puños

-¡Te odio! - ¿Cómo podía odiar a Mark? Era su
hijo. Ella misma se hacía esas preguntas-iSabes
qué más!- tomo distancia del chico -iMe iré!

-¿Abandonaras a Zee? - hubo silencio entre ambos, pero más por parte de ella --vete, quizás le hagas un favor al pobre niño

-¿Cómo te atreves a decir eso? - su voz salía con dificultad de su garganta. Nunca soportó que le dijeran ese tipo de cosas, a pesar ella se
consideraba una buena madre.

-Está desnutrido y tú solo piensas en derrochar tu miserable dinero en estupideces

-¡Basta!- su garganta estaba irritada por tanto
gritó -¡Soy tu madre! ¡No puedes hablarme de esa manera!

-Dejaste de ser madre la primera vez que te
metiste esa mierda a la sangre o cuando aspiraste!

-¡Quiero que me digas dónde las escondiste!- llevo sus manos a su cabeza con desesperación, tirándose el cabello

-las tiré por el excusado- ella abrió sus ojos - Ni te imaginas la felicidad que me dio ver es polvo deshacerse en el agua- Mark lo dijo de una manera burlesca y eunhye no lo soporto más

-Tú sabes qué pasa si no las consumó, damelas, hijo..... -tomó sus manos y lo miro esperando misericordia por parte de él - Por favor.

Mark se le rompía el corazón verla siempre así, tan vulnerable arrastrándose por querer drogarse.

Pero tenía que ser firme en ese momento, él amaba a su madre y tenía la esperanza de que ella lograría cambiar en algún momento.

-mamá-- tomó las mejillas de su progenitora- Hazlo por Zee, el merece una buena madre. Él te ama y te necesita lúcida

-No puedo ser buena madre si no me la das- Markse dio por vencido al escuchar esa estupidez, era inútil hacerla razonar en esas condiciones - Dime donde están

El pequeño Zee llevaba minutos escuchando y
observando aquella escena desde la escalera, sin entender nada. No le gustaba cuando ambos se peleaban por qué siempre terminaba Mark llorando por las noches y su madre también. Una ampolleta se alumbró sobre su cabeza y entendió lo que pedía su madre.

-Estás enferma- hablo Mark, mirándola con desprecio y asco -- Ya me cansé de esto, yo seré el que se irá de aquí

La mujer reaccionó enseguida sintiendo miedo,
tomó el brazo de su hijo con fuerza. En los ojos de Mark caían lágrimas pero su expresión era tan fría como un polo.

-¡No me puedes dejar!- Zee se asustó al igual que ella al escuchar las palabras de Mark, entonces su plan dio marcha. El pequeño niño subió las escaleras silenciosamente y fue a la habitación de Mark en busca de lo que le pertenecía a su madre Mark se safo del agarre bruscamente y dio media vuelta, ignorando los insultos de eunhye.

-¿Dejarás a Zee acaso?- Mark se detuvo y
soltó una pequeña risa -¿De que te ríes?- el chico se volteó y la observó determinadamente con una burlesca mueca

-Si dejo a Zee contigo morirá de hambre- la mujer comenzó a temblar de rabia -- Yo soy el que cuida de él, tu nunca has hecho nada ni por ti misma eunhye- llegó a un límite, sentía el sudor caer por su frente y la ansiedad estaba haciéndola temblar demasiado. Ella no iba a permitir eso, amaba a Zee con todo su corazón, era su pequeña alegría la única persona en el mundo que no le apuntaba con el dedo, la pequeñita persona que cada vez que tenía la oportunidad la sorprendía con - Te amo mamá quizás era la única persona que podía amar a un monstruo como ella, porque los niños no tienen prejuicios.

Alles. -ZeeNunewDonde viven las historias. Descúbrelo ahora