Me alegro mucho de conocerte (SuperCorp)

CAPÍTULO 7 : Saltando al agujero negro

"Entonces ..." Kara luchó contra la urgencia de levantar la mano para jugar con las gafas que no estaban en su rostro, el miembro se movía a su lado como si se estuviera rebelando contra ella. Por alguna razón, la amiga de Lena la puso nerviosa. Como, realmente nerviosa, y el tono que estaba usando no se lo estaba poniendo más fácil. "Lena dijo que estabas haciendo un trabajo de guardaespaldas para ella".

La rubia frunció el ceño, sin estar segura de si la mujer estaba diciendo la verdad o si estaba jugando con ella, probablemente lo último. Caminaban hacia el parque de National City desde el apartamento de Lena durante un par de minutos. Como esperaban, Sam, por lo que dedujo Samantha, insistió en el hecho de que Liam tenía que ver el mundo exterior y pasar algún tiempo en la naturaleza. Lena trató de discutir diciendo que era peligroso para los dos si alguien descubría de quién era hijo, que los cinco árboles del Parque Nacional de la Ciudad difícilmente podrían ser una naturaleza considerada, y que Sam no podía simplemente secuestrar a su hijo de esa manera.

Sam dijo que lo iba a hacer de todos modos, así que así fue como Kara terminó siguiendo a la mujer.

Su primera sugerencia fue que simplemente voló por encima de Sam para que nadie sospechara, pero la mujer vislumbró ese plan y dijo que se sentiría mucho más segura si Supergirl caminaba a su lado. Lo cual, ahora que Kara lo pensaba, era solo una excusa para acercarla lo suficiente como para hacer preguntas. Solo puso a Kara mil veces más nerviosa.

"No para todo el mundo", admitió Kara en voz baja mientras sus ojos los rodeaban para asegurarse de que el camino estaba limpio. Lo cual, por supuesto, era porque nadie estaba conspirando contra un bebé.

"Bueno, si no te importa que te pregunte ..." Sam esperó un segundo, probablemente para darle tiempo de correr si quería, antes de continuar con alegría detrás de sus ojos. "¿Qué diablos estás haciendo aquí?"

Podía escuchar en la forma en que sus palabras parecían apretadas, no vacilantes y directas que Sam no confía completamente en ella. O que está demasiado confundida para entender por qué Kara estaba allí, siguiéndola, mirando a la gente que mira en su dirección. Y, está bien, tal vez no lo calculó bien y tener a Supergirl siguiendo a una mujer con un cochecito alrededor podría haber atraído mucha más atención a dicha mujer de lo que predijo que haría, y es como si todos los ojos de National City se hubieran dado cuenta. el bebé miraba feliz a su alrededor, que era exactamente lo que no quería, pero estaba allí para mantener a Liam a salvo. Si es necesario, aunque, con suerte, no lo hará.

"Solo asegurándome de que todo esté bien", respondió finalmente, manteniendo los ojos pegados al suelo durante varios segundos antes de inflar su pecho de nuevo, luciendo más segura de sí misma. "¿Por qué? ¿Hay algún problema, Samantha?"

La mujer se burla, bastante fuerte, y toda la determinación de Kara pareció desvanecerse en el sonido del desdén. "Puedes llamarme Sra. Arias por ahora, Supergirl. A menos que quieras compartir tu nombre conmigo para que podamos estar en la primera base".

Había pasado un total de diez minutos con la mujer ahora, pero puede entender por qué es amiga de Lena. Comparten el mismo humor seco y el mismo nivel de sarcasmo que tiene Kara luchando por seguir. La diferencia es que, en Lena, suena lindo, mientras que Samantha, o la Sra. Arias, simplemente la está molestando. Ahora que lo pienso, eso es solo otra bandera roja. Sarcasmo sobre Lena: peligrosamente lindo.

Frunciendo el ceño para sí misma, infeliz por su línea de pensamientos, Kara decidió no responder. Siguieron caminando, tan lento que Kara estuvo casi tentada de preguntar si lo estaba haciendo a propósito para molestarla aún más. Aparte de eso, no pasó nada más. La gente estaba demasiado ocupada mirando con la boca abierta a Supergirl paseando por la calle para hacer cualquier otra cosa. De hecho, estaba segura de que había un adolescente que estuvo a punto de atropellar un coche porque los estaba mirando por encima del hombro. Ella podría haberlo salvado, pero no había forma de que se alejara de ese cochecito, amenaza eminente o no.