32┃pen-trach lad

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[CW: slight animal cruelty]

"¿ES ESO ANATOMÍA JANE?" Preguntó Norah mientras alcanzaba a Meredith y Cristina.

Meredith asintió con una sonrisa en la cara. "Mi madre me lo compró cuando tenía cinco años", dijo, "lo cual fue un regalo súper espeluznante para una niña de cinco años, pero me gustó".

"A mí también me regalaron uno cuando tenía seis años", afirmó Norah, "pero creo que el mío se lo regalé a Tim. Le gustó más que a mí".

Mientras las tres amigas daban una vuelta por el pasillo, charlando sobre el espeluznante muñeco de anatomía, los ojos de Cristina se abrieron de par en par. "¡Corred!"

Agarró los brazos de las otras dos residentes, arrastrándolas con ella. Norah y Meredith se miraron, desconcertadas, mientras seguían a Cristina corriendo por los pasillos, esquivando a las enfermeras y a los médicos en su camino.

Cristina dio un giro brusco y se detuvieron detrás de una pared. "¡Caramba! ¿Has visto a tu madre?" preguntó Norah, cruzando los brazos delante del pecho; Meredith y Cristina se apoyaron en la pared, jadeando.

"Acabo de ver a Owen", jadeó Cristina mientras las otras dos compartían una mirada confusa. "El comandante Owen Hunt. Ya sabes, el tipo que me sacó el carámbano del pecho..."

"¿Chico de Oh-pen-trach?" Norah recordó y ladeó una ceja: "¿Ha vuelto?".

"Creía que estaba en Irak", preguntó Meredith, compartiendo la misma mirada confusa.

"Pues sí, estaba, y ahora está aquí, en mi hospital", exclamó Cristina.

"Estás flipando como si te lo hubieras tirado o algo así", Norah negó con la cabeza, pero al ver que Cristina la miraba fijamente, sus ojos se abrieron de par en par. "¡Oh, no-Cristina! Te he dicho..."

"¡Fue un beso!" Cristina se defendió: "Fue una estupidez, no fue nada, ¡una estúpida nada!".

"Pero no crees que él piense que fue una estúpida nada", expresó Meredith.

"Es decir, es obvio que le gusto, y ahora ha vuelto", Cristina sacudió la cabeza con un suspiro derrotado. "¿Qué hace de vuelta?"

"El chaval de Pen-trach podría haber dejado la mili por ti", sugirió Norah encogiéndose de hombros.

"Eso sería gravemente acosador", añadió Meredith, "pero muy romántico".

"No me voy a involucrar con otro adjunto", declaró Cristina con firmeza.

Norah y Meredith compartieron una mirada mientras la primera resoplaba. "Ya veremos, cariño".

"Oh, cállate, Norah", le espetó Cristina a la morena, "Estás por encima de Sloan, y todas lo sabemos".

"Oye, tres de nosotras... un asistente cada una. Estamos locas, ¿no?".

"Yo diría que nos los hemos cargado todos".


❦ ❦ ❦


NORAH, MEREDITH Y Cristina entraron en el vestuario de los residentes, todavía charlando sobre la llegada de la nueva incorporación al hospital. Bailey entró en la habitación justo cuando guardaban sus cosas en sus respectivos cubículos.

"Bien, dos cosas", interrumpió Bailey sus charlas, "Todas tenéis un laboratorio de habilidades esta mañana. Es obligatorio. No se os ocurra intentar escaparos". Los residentes gimieron. "En segundo lugar, uno de vosotros no tendrá que ir al laboratorio obligatorio porque me asistiréis en mis esfuerzos por extirpar un tumor inoperable a una niña de diez años".

lo prometiste | mark sloanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora