CAPITULO II

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Seth esperaba que el profesor Flitwick se olvidara de buscarle un tutor, pero eso no fue así, el viernes se encontró con Hermione Granger mientras se dirigía a las pruebas y como nunca antes habían hablado, no hacía falta ser muy inteligente para saber que quería la castaña

—Black — saludó la castaña antes de continuar con el resto del grupo— ¿Puedo hablar contigo un momento?

—¿Tiene que ser ahora? — preguntó el chico levantando su nueva escoba haciendo que la Gryffindor levantara una ceja— Tengo las pruebas de quiddicht

—Serán solo cinco minutos y es más de tu interés que del mio— le dijo Granger frunciendo el ceño

—Bien— contestó antes de mirar a sus acompañantes— Llegaré en quince minutos, que vayan calentando y separándose en grupos según la posición que quieren ocupar

Estos asintieron y siguieron su camino en dirección al campo de quiddicht, quedando Seth y Granger en la salida del castillo.

—¿El profesor Flitwick te ha pedido que seas mi tutora no? — le dijo Seth suspirando, el pensó que habría elegido a un Ravenclaw

—Si— afirmó Granger antes de entregarle un pergamino

—¿Qué es esto? — preguntó el Black mirando fijamente el pergamino

—El horario de titorías, he tenido en cuenta el entrenamiento del equipo de quiddicht de Ravenclaw y las clases que tienes con Flitwick — añadió antes de que Seth pudiera abrir la boca— También está el plan de estudio y una división de los días que veremos cada materia

—Granger— llamó el chico en estado de shock antes de mirarla moviendo las cejas y con una sonrisa en el rostro— ¿Me has estado acosando?

—Po...¡por supuesto que no! — exclamó sonrojada la leona, en opinión de Seth se veia adorable y soltó una risa al verla indignada — Hablé con el profesor Flitwick y consulté los horarios de entrenamiento

— ¿Dos días por semana? — preguntó Seth al ver el horario mientras fruncia el ceño— ¿No es demasiado?

—Uno para cada materia— le dijo la castaña — He pensado que podíamos reunirnos en la biblioteca y tener clases de dos horas con un descanso en medio

—Si no queda otra— le dijo antes de mirarla fijamente con una pregunta en mente

—¿Qué pasa? — interrogó Hermione haciendo contacto visual.

—¿Qué ganas?— le dijo mirándola a los ojos, marrón contra gris

—¿Perdón? — preguntó Hermione —¿Que quieres...

—Vas a perder cuatro horas a la semana, ya has perdido tiempo al hacer el horario y seguro que has preparado la primera clase— le dijo y al ver su sonrojo confirmó que tenía razón — ¿Que ganas tu con esto?

—El profesor Flitwick me dará acceso a la sección prohibida de la biblioteca — le dijo con una sonrisa — ¡Puedo sacar dos libros al mes!

¿Como no está en Ravenclaw?  No pudo evitar pensar Seth al verla tan emocionada, sus ojos se iluminaron nada más mencionar los libros y Seth pudo notar que el verano le había sentado muy bien a la Gryffindor, no tenía una belleza deslumbrante como Fleur Delacour o algunas otras chicas, pero estaba lejos de ser fea.

—.... entonces el lunes a las seis te parece bien no? — pregunto la Gryffindor

—¿Qué? — pregunto al darse cuenta de que se había quedado mirando a la castaña — Ahhh, si, si, perfecto

—Nos vemos Granger— le dijo a continuación montando en la escoba para llegar a las pruebas

—¡No se puede montar en escoba en el castillo! — le gritó Hermione al verlo despegar con una sonrisa en el rostro

Sukha || H. Granger Donde viven las historias. Descúbrelo ahora