fragmentos de amor

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(capítulos finales)

Narra jules:

El día del juego había llegado. Estaba guardando todo lo necesario en mi bolso, me encontraba muy nerviosa.
El partido sería televisado, fue un alivio para Jaden- el cual no podía salir del hospital aún-. Había insistido tanto para poder presenciar mi primer partido de liga y para no hacerlo sentir mal sus padres lo verían con el. Angus, amber y Percy irían a verlo con mis padres.

"Buena suerte hoy, mi amor. Te amo mucho."

"Te estaré viendo y alentando desde aquí. Aún que me hubiese gustado verte."

Jaden había enviado dos mensajes a las ocho y media de la mañana, no le respondí puesto a que no había agarrado el teléfono en toda la mañana. Iba de un lado para el otro. Recibí una regañada de mi madre por no querer desayunar. Les podía jurar que mi estómago se hizo pequeño, los nervios y la ansiedad no me dejaban comer en paz.

-jaden acaba de llamarme, está preocupado por qué no respondes los mensajes. Faltan dos horas aún, relajate y contesta los mensajes de ese pobre chico antes de que salga del hospital para venir a verte- señala mi teléfono, mi madre sonrió con ternura al ver que no le había prestado atención- te irá bien hoy, entrenaron muy duro para este día.

-no estuve en un torneo desde hace mucho tiempo, los chicos nunca estuvieron en uno. ¿Que tal si perdemos?- volteo a verla- No, no puedo hacerlo.

-jules, respira. No perderán, estás preparada, yo lo sé- agarra mis manos- lo harán bien.

Asentí ante sus palabras, no me habían calmado del todo. Le respondió a Jaden luego de colocar mi guante en el bolso, este no tardó nada en enviar otro mensaje.
Estuvimos charlando por una hora, para cuando me di cuenta faltaba solo una hora más para que inicie el infierno.

"Tengo que dejarte, te amo."

"También te amo. Suerte."

Sonreí, deje mi teléfono en un pequeño bolsillo de mi gran bolso, antes de bajar pase por la habitación de Ashley. Cerré los ojos por unos segundos e inhale el dulce aroma que aún conservaba, bese el marco de la puerta susurrando con demasiada calma un te quiero.
Corriendo hacia la sala donde posiblemente estén mis dos padres.

-estoy lista...

-¿Si?- asentí ante la pregunta de mi padre- de acuerdo, sacaré el auto. Aún tenemos que pasar a buscar a los chicos.

[…]

Todos estábamos en el auto, mi madre iba charlando con amber, mi padre con Percy sobre que caricatura era mejor. Angus estaba apoyado en mi hombro durmiendo, todo iba en calma, nadie dijo nada respecto a qué pasaría hoy. Tal vez notaron mi ansiedad.

-llegamos- sonríe hacia mi- nosotros buscaremos estacionamiento y entraremos, ve con el equipo.

Asentí despidiéndome de todos, corrí hacia las entradas traseras, le mostré mi identificación a los de seguridad y me dejaron pasar hacia los vestidores. Antes de entrar me quede mirando la manija de la puerta, detrás de la puerta se escuchaban gritos y cosas golpearse.

-hola- saludé cuando entré- ¿Chicos?

Todos se quedaron quietos mirando hacia mi. Las cosas estaban en el suelo, Jack tenía sus manos en el cuello de trevor, Andrés estaban en un rincón abrazando sus piernas. Todo era un desastre.

-jules- suspira andres- todo es un caos, estoy feliz de que estés aqui- me abraza, acarie su espalda extrañada.

-¿Que ocurre, por qué están de esta manera?- pregunté alejándome de andres- se supone que tenemos que salir en media hora.