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Narra jules:

Deje que mi madre pasará una vez mas el cepillo para desenredar mi cabello, una vez que terminó me levanto y me tendió el vestido negro que era horrible. Nunca odie tanto un color como lo hacía ahora con el negro.

- avísame cuando hallas terminado- se acerca a la puerta- te esperaremos abajo- asentí sin mirarla, cuando salió me senté en la cama y suspiré.

Era el peor dia de mi vida, no quería salir de mi habitación, pero el funeral de Ashley será dentro de una hora y tendríamos que estar en la iglesia. Me desperté hace solo unos minutos, soñé que nada de esto paso y Ashley estaba conmigo.
Mi madre me despertó justo en el mejor momento recordando me la realidad. Ashley estaba muerta. Me mire al espejo, el vestido tenía una cremallera que no podía subir por mí misma, suspiré frustrada bajando la mirada sintiendo las lágrimas queriendo salir una vez más.

-dejame ayudarte- el entra a mi cuarto mientras se acercaba a mi a paso lento, lo mire por el reflejo del espejo, vestía un traje negro. En otras ocaciones me hubiese parecido demasiado atractivo, ahora solo me parecía triste tener que verlo vestirse de esa manera para un evento así.

-gracias- susurré cuando la cremallera estuvo hasta arriba dejando el vestido más ajustado a mi cuerpo, fui hasta mi armario y saque los zapatos que mi madre eligió, me los coloque y me puse unos aretes.

Jaden seguía mirándome pero ahora con preocupación y lo entendía, desde ayer que no comía nada, mi piel se ve más pálida de lo normal. Intenté sonreírle pero solo me salió una mueca, ni siquiera podía demostrarle que estaba bien.

-estare contigo en todo momento- informa, se acercó a mí y beso mi frente- lo prometo.

Mis manos fueron sobre las suyas y las apreté implorando que no me dejará sola, me abrazó mientras susurraba cosas lindas en mi oído.

-no quiero ir, no puedo- negue.

-shh, tranquila. Tienes que ser fuerte juls.

-no puedo serlo ahora, por favor no me pidas tu que sea fuerte- supliqué mientras me aferraba a sus brazos, no podía demostrarme fuerte por más que quisiera.

-no lo seas- coloca su frente sobre la mia- está bien, no lo seas.

[…]

-estamos aquí para recordar la triste muerte de Ashley wilson, niña de familia.

Mi cabeza estaba apoyada en el hombro de Jaden, no escuchaba lo que el tipo que se hacía pasar por sacerdote decía, la iglesia estaba llena, algunos compañeros de Ashley estaban al igual que maestros, familiares que no veía hace mucho tiempo se encontraban detrás de nosotros y amigos de mis padres, los henderson y mis amigos se encontraban en primera fila con nosotros. No me atreví a ver el cajón donde se encontraba Ashley, no podía verla así.

-ahora dará su discurso jules Wilson, hermana mayor de Ashley.

-jules- susurra Jaden llamando mi atención- tienes que ir.

Asentí para levantarme con el papel en mano, cuando estuve frente a el público tosí un poco aclarando mi garganta.

-hola- empece- amm...yo- mi vista fue al papel que sostenía entre mis manos, está estaba toda escrita con lápiz negro, manchada por algunas lagrimas. Mire a Jaden, este solo sonrió hacia mi dándome confianza, suspiré y miré a la gente que estaba frente a mi- recuerdo la primera vez que vi a Ashley, estaba durmiendo entre los brazos de mi madre- sonreí- jamás había visto una cosa tan pequeña y hermosa. Mi padre me subió a la camilla y con cuidado me acerque a ella, me sorprendí por qué estaba calva, sin cabello- rei un poco, la mayoría de la gente lo hizo conmigo- supuse que tenía frío así que con mis dos manos tape su cabecita, ella río por mi accion, le había dado cosquilla. Después de ese día, nada volvió a ser como antes. La casa era todo un desastre con sus llantos y gritos. Yo había estado preguntando en la escuela si alguno de mis compañeros querían una hermanita, que con gusto les daba la mía- volví a reir-millones de recuerdo se me pasan por la cabeza al escribir esta carta, recuerdos que preferiría contar en otra situación. Duele mucho saber que mis recuerdos solo se quedarán estancados en este día, solo que este día es algo que preferiría olvidar. No estaba preparada para esto- sentí como mi voz se cortó y mis ojos se nublaron- no quiero despedirme de ti ahora, te quiero aquí conmigo- limpie mis ojos- recuerdo la vez que estuvimos en mi cuarto escuchando música a gran volumen, comíamos palomitas, le bajaste a mi teléfono y me dijiste..." Sabes,  estoy orgullosa de ti. Cuando sea grande quiero ser como tú, así de linda, inteligente y fuerte. Eres una de las mujeres más fuertes y grandes que eh podido ver en mi vida, jamás dejas que algo te lastime por completo. Admiro eso, eres como Superman o algo asi"- limpie una vez más mis ojos sonriendo- ahora seguiré siendo esa mujer fuerte y grande, solo para que sigas estando orgullosa de mi, te amo mucho y te voy a extrañar demasiado.

[…]

Gente iba y venía en mi casa, después de funeral innumerables personas vinieron a mi casa a comer. No lograba entender cómo podían comer en ocaciones así, hace unos minutos enterraron a mi hermana y ellos comían o charlaban como si nada, mi puerta se abrió mostrando a Jaden que traía comida y un vaso de agua.

-no tengo hambre- dije, el solo deja las cosas en mi escritorio.

-tienes que comer algo.

-tengo un nudo en el estómago, Jaden. No puedo comer.

-amor- susurra- por favor.

-comere cuando tenga hambre- mire como angus intentaba animar a Percy, se encontraban en mi patio pero el pequeño solo mantenía la cabeza baja.

-no fue tu culpa.

Cerré mis ojos sintiéndome frustrada, no quería sentirme culpable pero mi mente jugaba en contra, millones de imágenes pasaban por mi mente y escenarios distinto donde yo pude intervenir para que Ashley estuviera conmigo.

-no fue tu culpa, amor- repite con suavidad.

-no creo poder salir de esto, Jaden. S-siento un gran vacío en mi pecho y mi corazón...mi corazón duele.

-claroque lo harás, no te digo que mañana ya hagas como si nada, jules- hace que lo mire- tuviste una perdida, perdiste a tu hermana y el dolor seguirá, no te pido que lo superes rápido, tómate tu tiempo. Te pido que el dolor no llegue a consumir te hasta el punto de perder tu esencia. Ashley no lo hubiese querido así.

-no sabes lo que Ashley hubiese querido.

-se que esto no, si Ashley hubiese tenido la posibilidad de ella misma organizar su funeral nadie estaría de negro ahora, todos vestían de un color llamativo y no sería para nada triste- Rei al ver que tenía razón, Ashley hubiese hecho todo eso y más, no le gustaba ver mal a las personas- ella hubiese querido que sonrías por ella.

Sonreí sintiendo mis lágrimas, abracé mis piernas y soltó un suspiro, mire a Jaden unos segundos, tenía razón.

- te amo Jaden, gracias por estar aquí.

El sonreí para asentir, se acercó a mí y me abrazó

-tambien te amo, mi amor.

Si la muerte de Ashley me dolía no puedo imaginar la de Jaden, el en algún momento se iría y tendría que sufrir una vez más. No podría con dos dolores, me sentiría tan rota que no podría seguir de pie por nadie, ni aún que Jaden me pida ser fuerte.









fragmentos de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora