Capítulo 27

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Luis- *me rio mirandola*
Cosme- venga, anda, vamos a cenar

Los tres caminan hacia el restaurante que comentó Cosme, una vez que llegan, piden una mesa y el camarero se la da en  la cristalera donde se ve las calles vacías y alumbradas por las farolas.

Hablan y hablan, mientras empiezan a cenar, después de haber pedido lo que querían.

Cenan entre risas, anécdotas vergonzosas contadas por el padre de la chica con flequillo, Aitana, con la cara roja de la vergüenza y Cepeda, riendose sin parar por las anécdotas y por la cara de su amiga.

Terminan de cenar y salen de aquel restaurante, caminan al coche del más mayor de los tres. Cosme se sienta en el piloto y Aitana y compañía en la parte trasera del coche.

Llegan a Madrid y Cepeda guía a Cosme hasta llegar a su casa, una vez allí, se despide del más mayor cogiendose de la mano y sacudiendolas de arriba abajo, mientras que la chica y él se bajan del coche, se dan un abrazo fuerte y se prometen quedar otro día, y mientras que el guitarrista entra a su casa, la chica entra de nuevo al coche, pero está vez sentandose en el copiloto.

Cosme- y? Te lo has pasado bien?
Aitana- muy bien papá, muchas gracias por este día *sonrio poniendome el cinturón de seguridad*
Cosme- me alegro cielo *sonrio conduzco hacia nuestra casa*

Llegan a su casa y aparca el coche, entran y dejan las cosas en su sitio, suben a sus respectivas habitaciones y se ponen el pijama.

Cosme va a la habitación de su hija y una vez que llama y recibe una "pasa"  de su hija, entra y cierra la puerta, se acerca a ella y le acaricia la mejilla, le dice buenas noches junto a un beso en la frente y se va de nuevo a su habitación.

¡¡AQUÍ OTRO CAPÍTULO!!

Entre ricos y pobres Donde viven las historias. Descúbrelo ahora