Dirty [Mr. BETA]

05

Cuerpo sudoroso y respiración agitada.

Andra estaba en la peor época de su vida, donde sus sueños le hacían una mala pasada y terminaba recordando cosas que quería olvidar.

Como a su familia.

Siempre para su cumpleaños sucedida ese tipo de cosas donde sin querer recordaba cuando le descubrieron usando lápiz labial y recibió los gritos de su vida. Los primeros golpes y también la humillación pública.
Donde sus tíos le juzgaban y sus primos se burlaban, sus indirectas y todo ese tipo de comentarios homofóbicos  a su persona eran el pan de cada día y empeoraba en las reuniones.

Odiaba sentirse vulnerable por eso huyó.

Salió de su ciudad natal para ir a la capital con dinero guardado de su trabajo de medio tiempo.
Un viaje que no se arrepiente porque la conoció a ella, su soporte de vida.

Harin era quien compartía asiento con él en el trayecto y su forma de ser hizo que las cosas fluyeran hasta que confesó que no se sentía muy cómodo intentando una relación con una mujer. Donde sin querer ella también confesó su forma de ganar dinero con fotografías en las redes como modeló.

El primer mes ella le dio estadía hasta que pudo alquilar su propio cuarto y luego...luego ganó popularidad con su encanto femenino.

Estaba todo perfecto hasta que decidió mostrase al mundo como quería que lo vieran. Como una mujer y entonces se dio cuenta que nada en él estaba mal.

Pero las palabras aún duelen.

Y sobre todo cuando es acompañada de esa mirada llena de decepción que ya conoce bien.

Conoce la lástima y no quiere eso de nadie.

—¿Otra pesadilla? — pregunta Taira  — ya son muchas. Deberías tomar pastillas para dormir.

—y cual es tu problema, tú ni siquiera deberías seguir aquí.

—estoy tratando de que esto funcione.

—no hay nada entre nosotros — suelta el castaño cortante — la pasamos bien y nombramos a otros. Solo eso. No hay nada más que dos personas usando al otro para su beneficio.

Taira hace una mueca entre molesto y triste más no dice nada, es orgulloso y nunca iba a mostrarse débil ante unas palabras.

Andra solo espera que lo abandoné, como cada fin de semana para luego pensar una y otra vez sobre su miserable vida.

—¿Qué estoy haciendo?

Se pregunta mientras trata de contener sus ganas de llorar, mira su celular y ahí está la fotografía de su maestro. Lo desea en la cama.

Pero no por algún sentimiento o un beneficio.

Solo lo quiere porque le gusta esa calidez que brinda cuando está con él, algo que hace años no siente.

Al menos en una mentira quiere sentirse querido y deseado por quien le da esa seguridad.

Solo con él.

.

Harin mira las fotos y Yolka es quien capta su atención.

Quiere convencerlo de que pose junto a Andra otra vez, no puede negar que los patrocinadores han dado una generosa donación en la cuenta bancaria para que sea un modelo exclusivo junto a Andra.

Nunca recibían efectivo, solo productos y ofertas  que luego vendían y sacaban dinero.

Puro canje y ofertas.