Con la intención de darle fin a las constantes preguntas familiares, con referencia a su situación sentimental, Jisoo, una próspera y joven empresaria, pero con una familia conservadora y tradicional detrás, decide recurrir a un método extremo, pero...
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Luego de haberse marchado, Jisoo balbuceaba incoherencias que ni ella misma podía entender. Para su suerte, Jennie la acompañó hasta su casa. Junto con el chófer, ayudaron a bajarla y dirigirse dentro donde una somnolienta Lia esperaba por ellos.
—Unnie, ¿por qué mi hermana apesta a alcohol?.—cuestionó la menor viendo a su hermana a punto de dormirse.
—Créeme, te quedarás fascinada cuando te cuente o quizá lo entiendas—rió Jennie—. Subamos primeramente a Jisoo.
Siendo discretos y silenciosos, dejaron a la omega recostada en su cama. Por supuesto, le quitaron los zapatos antes de envolverla en sábanas. Después, bajaron de la misma manera que subieron. Allí, Jennie narró el propósito y la razón del porqué Jisoo se encontraba de ese modo tan deplorable.
Lia sólo pudo reírse de tal situación aunque también compadecía a su hermana. Tener padres como los suyos, era una cuestión lógica para realizar tal mentira.
—Descuida, guardaré el secreto.
—Lo sé—dijo Jennie—. Ahora me voy porque Yoongi espera por mí. Cuida de tu hermana.
Asintiendo, Lia se despide de Jennie. Una vez sola, sólo puedo suspirar para si misma. Hablaría con Jisoo apenas despertara, por ende, ella también decidió ir a descansar un par de horas más.
Suerte no soy omega. Pensó Lia al cerrar sus ojos y dormirse profundamente.
Del otro lado de la ciudad, un alfa se encontraba completamente pensativo. Riéndose de si mismo al recordar su encuentro con esa omega por segunda vez.
—¿A quién se debe esa risa de estúpido?.—cuestionó su mejor amigo.
Taehyung resopló hallando a Jimin sentado frente suyo, el rubio de ojos azules observaba burlón a éste.
—No es nada importante—mencionó tomando otro shot, sintiendo como el líquido quemaba su garganta y alteraba un poco sus sentidos—. ¿Dónde está Rosie?.—preguntó intentando cambiar de tema.
—Aquí estoy oppa.—expresó sentada al lado de Jimin.
—Mi novia ha estado aquí todo el tiempo, Kim. O mejor dicho, ambos. Quien se desconectó del mundo, fuiste tú—rió Park—. Y por eso mismo queremos saber la razón. Baboso.
Kim chasqueo su lengua sintiéndose un completo idiota por no darse cuenta que ni siquiera les prestó atención a sus amigos desde su cruce con la bonita omega.
—Ya mencioné que no es nada importante. Sólo tuve un choque con alguien.—susurró lo suficientemente audible para ambos Park.