Hair Clip [Varios x Takemichi]

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-T r i s t e

...

Haruchiyo observó cómo Takemichi y los dos chicos altos salían de la cancha y regresaban al interior de la casa. En silencio miró a la persona que no estaba muy lejos a su lado, el tatuaje de dragón al que se suponía que debía pasarle la pelota.

Observó aburridamente la sonrisa de comemierda plasmada en el rostro de Mikey, los hombros temblando por tratar de contener la risa.  —joder...—Mikey maldice mientras se ríe sombríamente, acercándose a sus amigos en una caminata victoriosa.

Haruchiyo no tiene que decirlo o pensar; que estaba planeado y el chico con la cabeza tatuada golpeó intencionalmente la cabeza del pobre rubio con la pelota. Estaba claro como el agua y no cree que los chicos estén ocultando lo obvio que era.

Solo Mikey, Baji y Draken estaban acurrucados. El resto del grupo se dispersó y continúa el juego como si nada hubiera pasado. Haruchiyo desvió la mirada del trío y caminó hacia Rindou, quien estaba de pie y sin saber si debía seguir a su hermano o no. —vamos a casa.

—¿eh? SÍ, vamos. Ve a buscar la pelota.—Rindou dice mientras camina hacia la línea de banda, tomando sus pertenencias y las de su hermano.

Haruchiyo se dio la vuelta y vio a ToMan jugando como si nada hubiera pasado. Mitsuya dispara la pelota, desafortunadamente golpea el borde del aro y la pelota rebota hacia atrás y hacia Haruchiyo. Sin pensarlo dos veces, atrapó la pelota con una mano y sin decir palabra se dio la vuelta para irse.

—Oi—Baji llamó.

—Vamos a jugar de nuevo mañana - Oh, bueno. No hay mañana. Tenemos campo de entrenamiento—Rindou dijo. —Nos vemos allí.

—Entonces deja la pelota. Se lo devolveremos más tarde.— dice Kazutora, apoyándose contra la cerca exhausto.

—No puedo. No es tuyo.—todos los ojos estaban puestos en Haruchiyo quien habló, lo suficientemente alto para que todos escucharan. Su voz era perezosa, como si tuviera que sacar esas palabras de su boca solo para poder decir algo. —Pregúntale a Takemichi primero si quieres pedir prestado.— pero luego el chico de cabello blanco procede a irse, sin siquiera esperar respuesta alguna.

—Mierda. ¿Esa era la pelota de Takemichi?—Baji hace una mueca de broma. Limpiándose la palma de sus manos en su camisa.

Rindou arqueó una ceja. Haruchiyo se detuvo.

Mikey mueve sus manos desdeñosamente. —No gracias, chicos.—rápidamente se volvió hacia Chifuyu. —Chifuyu, toma tu pelota.

La atención de todos se centró una vez más en Haruchiyo después de que este último dijera algo bastante incoherente, lo que provocó que los chicos, incluso Rindou, dieran un paso más cerca.  —¿ah? — Baji levantó una ceja, su sonrisa se convirtió en un ceño fruncido.

—Pregunté ¿qué tipo de reacción fue esa?—Haruchiyo volteó hacia el grupo a pesar de que él estaba parado afuera y detrás de la cerca. Rindou rápidamente se movió sobre su pie y corrió hacia el hombre de cabello blanco, siseando un —¡oi! —como si estuviera tratando de decirle al chico que no dijera nada más.

—¿Qué reacción?—Baji inclinó la cabeza tontamente, con los ojos ligeramente abiertos y sus labios ahora en un puchero. Su cara lo dice todo.

—Tu reacción. En este momento. Estabas demasiado asqueado.—Haruchiyo continuó, mirando fríamente al chico. —muy obvio.

—Vamos a casa. Podríamos pelearnos aquí.—susurró Rindou, tirando del brazo de Haruchiyo, pero este último no se movió.

—¿De qué reacción estás hablando?—Baji se rascó la nuca, una vez más pareciendo no tener idea de lo que estaba hablando el chico. Mikey luego se acercó y le susurró algo al oído, luego Baji gritó, su voz profunda retumbó cuando dejó escapar un: —¡AAH!

Baji pasó de Mikey a Haruchiyo, con una expresión sarcástica de asombro pegada en su rostro. —¿Te refieres a esa reacción? No, eso no fue nada, hombre. No te preocupes.

Rindou sintió escalofríos recorrer su espalda, una gota de sudor cayendo por su sien cuando vio a Haruchiyo con su lengua empujada en la parte interior de su mejilla. A pesar del aire apretado entre su mejor amigo y la ToMan, se preguntaba ¿qué le molestaba tanto?

Cuando el grupo terminó de reírse entre sí, se volvieron hacia los dos chicos, preguntándose por qué el chico de repente se quedó en silencio.

Haruchiyo jadeó, con el pecho subiendo y bajando suavemente.

—Bien.—Haruchiyo sonrió. Con sus ojos casi cerrándose en dos medias lunas sonrientes.

Rindou no podía mover ni un solo músculo después de ver lo que acababa de ver. Pero fue como si todos sus sentidos regresaran tan repentinamente que solo se encontró siguiendo a Haruchiyo, quien comenzó a alejarse, aún sonriendo amablemente al grupo de chicos. —Nos vemos mañana.

Tan pronto como los dos estuvieron fuera de la vista, Rindou se tapó la boca con una mano, sacudiendo la cabeza con incredulidad en un movimiento dramático. —¿Qué diablos fue eso?

—¿Qué diablos fue qué?

—¡Eso! Tú sonreíste.

—Soy una persona normal. Por supuesto que sonrío.

Rindou se estremece, sonriendo torpemente. —Sí. Nunca vuelvas a hacer eso. Me sacaste de quicio.

|Nota:Créditos del Fanfic a Soyaverse.|