«La Princesa y el General» ♡︎

«Un favor» シ︎

[POV Gorou]

Apenas iba amaneciendo y los primeros pájaros cantaban, el frío comenzaba a desvanecerse y los rayos del sol comenzaban a calentar la tierra.

Mis orejas se movieron ligeramente para así estirarme pero me detuve al sentir algo que abrazaba mi colita y me hacía peso en uno de mis brazos, abrí los ojos de golpe y al frente mío ví una escena tierna, Su Excelencia estaba acostada de enfrente mío, me abrazaba mi colita mientras que mi brazo era usado como almohada. Normalmente me llegaba a incomodar que alguien tocará mi colita, pero no podía molestarme, se veía tan tierna mientras abrazaba mi colita.

Acerque mi mano con cuidado para así acariciar su suave cabello con ternura y luego moverlo atrás de su oreja para tener una mejor vista de su rostro, mi mano bajo hacía sus mejillas de porcelana, eran realmente suaves y parecía que me habían hipnotizado aunque no dejaba de tener ese recuerdo de anoche, que me hubiera dejado verla en ese estado fue nuevo, pero no me arrepentía.

Seguí acariciando sus mejillas con ternura, no sé cuanto tiempo pasó pero cuando menos me lo esperaba mis ojos se encontraron con los suyos que estaban abriéndose, pude sentir como su mirada estaba mucho más relajada y eso hizo que sonriera como si embobado estuviera.

Su Excelencia se veía tan linda y los primeros rayos de sol que entraban a la habitación hacían relucir su belleza, me dió un poco de gracia ver como entrecerró los ojos, me observó y luego volvió a cerrar sus ojos para abrazar mi colita como si fuera un Koala, se me salio una pequeña risita y me acerque más a ella para poderla abrazar y acurrucar su cabeza en mi pecho, parece que eso la despertó por completo porque sentí como soltó mi colita y me miraba con esos hermosos ojos.

Sus mejillas se pintaron de un rojizo y sus manos comenzaron a temblar un poco, parece que la incomode o la puse nerviosa, sostuve sus manos con delicadeza y le sonreí para así envolverla en un cálido abrazo del cual solamente me separé al sentir que sus manos dejaban de temblar, al separarnos del abrazo está me dedico una sonrisa que desearía tomarle foto pero tendría que resignarme a guardarla en mi memoria, le di un besito en la frente y me levanté rápidamente de la cama lamentando mi decisión por los nervios que me inundaron e hicieron que mi colita se moviera de lado a lado mientras que entraba al baño para cambiarme, al salir deje que Su Excelencia entrara y le dije.

Gorou: "Estaré en la cocina para ver con que ayudar, la veo en un ratito."

Me salí de la habitación sin dejarle contestar, cerrando la puerta detrás de mi para así tomar un respiro y calmar mis nervios, cuando lo logré me dirigí hacia la cocina.

[POV Kokomi]

"¿Dónde estoy? ¿Acaso estoy devuelta en el Santuario? No, estoy segura que sigo en la hacienda Kamisato, entonces debe ser un sueño, si debe ser eso" pensaba para mí misma mientras caminaba sin rumbo por un Santuario que no reconocía, voces, personas y situaciones que no recordaba o reconocía pero a la vez tan familiares, camine hasta que llegue a un lugar completamente desconocido, ahí hacia un hombre parado.

Aquel hombre tenía el uniforme de la isla Watatsumi, camine más cerca hasta llegar a su lado, este se dió la vuelta revelando que no tenía rostro, una nube blanquecina la cubría y no dejaba ver más allá.

Kokomi: "Lo siento, aún no te recuerdo.."

Ese hombre lo reconocía, ya van varias veces que lo veía en mi sueño, tenía una cicatriz característica en su brazo el cual me extendió, como si me invitará a abrazarlo y yo solamente me acerque para abrazarle.