Todo pero Nada

Capítulo 17 : Se pilla primero a un mentiroso que a un cojo...

Me he comprometido a crearle una contraseña a la prima de Aitor. Rosa me enseñó como hacerlo y me imagino lo descolocada que debe de estar, después de todo lo que ha pasado en su vida, así que todo en lo que pueda ayudarla lo haré.

Me siento en la silla del escritorio frente al ordenador y empiezo a teclear, Sonia se sienta frente a mi y siento cómo me observa.
No la culpo las mujeres somos así, marujas por naturaleza. Yo también la escanee hace unos minutos cuando entró por la puerta de la clínica.

Es una chica que llama la atención, alta, delgada con una melena rubia, brillante y ligeramente ondulada que resalta unos ojos grandes y azules como el mar.

− Gracias Julia. Va a ser verdad que eres una chica que vale para todo.

Me río y le digo que no es verdad, hay miles de cosas para las que soy más que nula, entonces me saca un tema que me hace sacar los colores.

− Por cierto, siento la intromisión de antes. No pretendía interrumpir nada.
− Oh no, tranquila... no pasa nada. - digo mientras fijo la mirada en la pantalla del PC.
− Me alegro de ver a Aitor tan feliz. Esta claro que eres una persona importante para él.

Dios mio, me muero de vergüenza, casi no la conozco y no me siento cómoda hablando de este tema, pero le sonrío con complicidad, en realidad él también me hace feliz a mi y en estas semanas se ha convertido en alguien imprescindible en mi vida.

− Pero quiero advertirte de algo Julia, me caes muy bien y no quiero que lo pases mal como en su día lo pasé yo.

Aparto la mirada del ordenador y fijo mis ojos en los suyos, de ese color azúl mar, que me miran de una manera intensa, intimidante incluso.

− Aitor es un hombre de diez, es cariñoso, atento y muy, muy profesional en su trabajo, y esto último es su mayor problema.
− Perdona Sonia, creo que no te estoy siguiendo mucho. - digo mientras froto mis manos contra mis piernas, bajo la mesa. Se han empeñado en sudar de manera imparable. No entiendo que me quiere decir esta mujer, pero mi cuerpo empieza a tensarse, hay algo en ella que me inquieta.
− Lo que te quiero decir es que no es el mejor novio del mundo. Puede llegar a querer mucho a una persona pero su trabajo siempre termina interponiéndose de una manera o de otra.
− Bueno no sé, no le conozco lo demasiado aún para juzgar eso. Vamos poco a poco, no quiero precipitarme y él tampoco. - Digo incomoda mientras intento desviar la conversación - Por cierto ¿qué usuario quieres que te ponga?
− Ah si, no sé... sls86 estará bien.

Asiento la cabeza pero ella vuelve a la carga, no sé a donde quiere llegar pero me esta hartando ya el temita demasiado.

− Solo quiero que te asegures bien, tienes pinta de ser una buena chica y no me gustaría verte luego con el corazón roto. Esas heridas cuesta demasiado curarlas. Yo creo que todavía no he superado mi ruptura con Aitor...
Dios, Dios, Dios.... ¿Cómo que con Aitor? ¿qué Aitor?, ¿mi Aitor?
No... pero si es su prima...
Dios esto no me puede estar pasando a mi.

Mi cabeza se queda bloqueada y el aire parece que no llega a mi pulmones. Sin nombrar mi cara que se ha quedado de un blanco cadáver que debe meter miedo al mismísimo Drácula.

− ¿Estás bien Julia? Estás demasiado pálida, ¿te ocurre algo?

Suspiro antes de contestar y escondo mis manos bajo la mesa, ahora no paran de temblar.

− Sí, sí. Estoy bien. No sabía que habíais sido pareja.
− Ay perdona, pensé que Aitor te había puesto al día. A veces soy demasiado bocazas. No debería haberte dicho nada.
− No... no pasa nada, solo me ha pillado de sorpresa la noticia. No te preocupes - intento disimular.
− Julia, esto no cambia nada, lo mio y lo de Aitor ya se ha acabado, fue algo que pasó en el pasado, antes de conocerte a ti, y de verdad que os deseo lo mejor. Perdona por ser tan entrometida.
− No te preocupes de verdad, todo esta bien. Mete tu contraseña aquí por favor.