(...)-Cuando el mundo parezca cruel y te haga sentir ccomo un tonto, te prometo y tú verás, yo seré tu remedio...- le cantaba a mi bebe de cuatro meses ya.
Felicidad, no creo que pueda describir mi vida en estos momentos con otra palabra que no sea esa. Todo ha sido tan hermoso. Estar embarazada no es fácil y ya mi panza está más grande, ya me cuesta más caminar y hacer las cosas que hacia antes, pero tengo el apoyo de todo.
James se ha portado maravilloso y siempre está al pendiente de todo, cada turno, cada ecografía al igual que Simon. No le cabe la felicidad y siempre está cumpliendo mis antojos.
-Mi amor James está abajo- Simon se paró en la puerta del cuarto.
-Oh ya voy- me paré con dificultad y junto a Simon bajé las escaleras.
-Hola James como estas, como esta Alex?- le pregunto, Alex es su pareja.
-Pues bien emocionado como yo y tu y el bebé, te traje unas cosas para el niño- me dijo y rebuscó en unas jabas que traía.
-Jaja James no sabemos aún que es si es niño o niña- le dije riéndome.
-Shhh yo tengo el presentimiento de que es un niño y ya, es instinto paternal- me dijo y me enseñó unos chupetes y peluches azules.
-Yo también creo que va a ser un niño- dijo Kleo entrando a la sala.
-Yo también- miré a Simón.
-No ya que, solo falta que apuesten a que va a ser varón- dije riéndome y todos lo hicieron igual.
-Bueno no importa si es niña o niño igual lo vamos a querer y apoyar en todo. Va a ser el más consentido de la familia- dijo mi mamá secándose las manos en su delantal y caminando hacia nosotros.
Mi madre vino para Londres hace poco menos de un mes, quiere estar presente y la verdad me ha ayudado mucho. Mi papá se quedó en los Estados Unidos pues ya se estaba recuperando y tenía que atender los negocios. Sin embargo me prometió que vendría para el parto.
-Ay mamá me vas a hacer llorar, sabes como estoy de sensible- una lágrima tonta cayó de mi ojo y todos se echaron a reir.
-Solo tiene cuatro meses y ya tienes los cambios de humor de una embarazada neurótica- dijo Kleo y me fue a abrazar.
-Bueno familia, les quería decir que maña- el timbre de la puerta me interrumpe.
-Yo voy- Simón fue y abrió. Un muy alborotado y emocionado Fredd entró corriendo con miles de cosas rosadas.
-Falto yo, mira todo lo que le compre a la niña- me dijo y empezó a sacar las cosas como un loco.
Todos lo miramos y no pudimos aguantar la risa. Fredd solo nos observó fingiendo molestia y puso con un gesto drama-gay sus manos en sus caderas.
-Les apuesto a todos que es una nena, esa barriga es de una nena y mi instinto de tío me lo dice- apartó un mechón de su cara.
-Bueno Fredd mañana lo sabremos, eso es lo que les quería decir- todos me observan.
-Mañana tengo turno para saber el sexo del bebé y obviamente todos tenéis que estar ahí- les dije con una mirada amenazante.
-A sus órdenes Señorita- dijeron James, Simón y Fredd al mismo tiempo y empezaron a reir.
-Bien, entonces mañana a las 9:00 am aqui- todos asintieron con la cabeza y se pusieron a conversar.
Hoy era viernes de familia y mi familia es esta, mi mamá y Simon habían cocinado y también prepararon aperitivos para pasar la tarde. Estábamos en el patio trasero, todos estaban cantando o conversando y yo era del primer grupo. La verdad que no podía ser mejor.