CAPÍTULO 12

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Doce años antes.

Lo único que él quería era estar junto a sus padres y pasar tiempo con sus amigos pero cuando llegó de la escuela emocionado por qué sus notas resultaron ser excelentes; esa obscuridad que tanto lo perseguia en sus sueños lo alcanzó y en un solo segundo su mundo se derrumbó, vió como sus dos razones que le daban fuerza y felicidad  morían en medio de su sala. Llamó rápidamente a una ambulancia pero fue inútil, sus padres habían sido asecinados cruelmente ¿Por qué? No tiene conocimiento de eso tan sólo tenía 15 años cuando lo presenció, después de ello quiso vengar sus muertes pero ¿Que podía hacer un adolescente sin experiencia alguna? — Nada — se respondió así mismo. No tenía dinero, tampoco tenía mas familia, no quería irse a un orfanato, no quería quedarse en Corea, no quería estar sólo, lo mejor que pudo pensar en ese momento era morir e irse a dónde sus padres

— ¡Que carajos haces niño! — Alguien lo tomo por los hombros y alejó de la orilla del presipisio en donde hace un momento en pelimenta habría acabado con su vida. No quiso mirarle el rostro solo se quedó parado en medio de la calle, estaba molesto ¿Que clase de estupido se atrevió a meterse en lo que no le importa? Un completo desconocido evitó que el chico se reuniera nuevamente con sus padres. Seguramente es un monje, de esos que te avientan toda una historia motivacional para que aprendas a valorar tu asquerosa y mugrienta vida de la cuál quieres acabar lo antes posible por qué no todos nacen perfectos y sin problemas. Levantó un poco la mirada y se detuvo a la altura de sus hombros, ya viendolo bien ese traje y tipo de zapatos no le hacían ver cómo un monje, demasiado extrovertido como para vestirse tan elegante no le tomo mucha importancia, tomo su mochila, dio media vuelta y emprendió camino

Usualmente al hombre no le importa nadie que no sea él mismo. Cuando vio al chico apundo de arrojarse inconcientemente salió corriendo para detenerlo, no pensó, solo actuó y jamás había hecho algo así; él siempre se ha mantenido al margen de los problemas agenos, no le importan y no tienen por qué hacerlo. Vió al pelimenta alejarse sin decir una sola palabra, ni siquiera lo miro ¿Debería seguirlo? — ¿para que? seguro se dirige a su casa — sacó un cigarrillo, lo encendió y se recargo en la cerca siguiendo con la mirada al menor.

La noche había caído, el viento frío golpeaba su rostro moviendo sus cortos mechones de cabello, podría jurar que a caminado bastante pero aún no reconocía el lugar en donde se encontraba, no había suficiente luz es por eso que se le dificultaba un poco al tratar de distinguir las calles. Cuando salió de su casa solo dejo que sus pies lo guiarán así que era la primera vez iba a ese sitió. Cada cinco segundos volteaba para ver si lo iban siguiendo pues escuchaba los pasos de alguien acercándose, camino aún más rápido pero un jalón lo izó detenerse; un chico posó frente a él con un objeto punsante en manos, lo único que le faltaba ser asaltado en medió de la nada, genial. Las ratas como él solo quieren dinero y cosas de valor lo cual él no tiene y lo confirmo cuando cuando el chico termino de registrar todos sus bolsillos sin encontrar nada

— ¿Ves? No traigo nada — dijo con indiferencia con las manos levantadas a la altura de su cara. Al mayor no le agrado esa actitud así que intento apuñalarlo pero el menor lo esquivo rápidamente eso lo izó enfurecer y lo atacó con mayor fuerza. Yoongi estaba seguro de que no se salvaría  pues el contrario era aún más alto y le ganaba en cuanto a fuerza, se defendió como pudo pero el cuchillo cortó su hombro derecho cuando intento quitársela y en un descuido también rozó parte de su costilla — ¡VETE AL CARAJO! — gritó tratando de alejarse pero tropezó y calló al suelo. Pareciera que el azabache tenía intenciones de matarlo ya que aprovecho para intentar nuevamente apuñalarlo pero está vez directo al corazón, cuando el pelimenta creyó que sería su fin escucho un disparo su mirada fue directa al chico dándose cuenta de que la bala había atravesado sus manos, las cuales sangraban sin ninguna intención de detenerse, cualquier persona que haya presenciado un caso como ese seguramente abría quedado en shock, pero él no, tal vez está un poco sorprendido pero no a tal punto de desmayarse 

𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐌𝐀𝐅𝐈𝐀 -- 𝚈𝚘𝚘𝚗𝚜𝚎𝚘𝚔, 𝙽𝚊𝚖𝚓𝚒𝚗 𝚢 𝙹𝚒𝚔𝚘𝚘𝚔𝚅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora