SOULS COLLIDE

NO MÁS ORGULLOSA QUE TU

Salió desconcertada del lugar, tenía ira y algo de tristeza por lo que había pasado, tampoco era que lo entendiera muy bien, todo lo que había esperado durante la semana su encuentro para que Karin lo arruinará de esa manera. Si tan solo no hubiera aceptado ir a los baños...

—Tonta Giovanna...ten carácter, ¡valor!, ¡que estúpida soy en serio!... —se decía mientras iba por su última clase, y por primera vez en su vida sintió ganas de llegar pronto casa.

***

Había quedado tan furibunda que no puedo evitar darle un golpe al cubículo.

—Estúpida chica —marcó un manotazo contra la metálica puerta—Agrrrr—se retiró de un brusco tirón el cabello desordenado y rápidamente salió de ahí. Fuera una chica que se lavaba los dientes se le quedó viendo asustada.

— ¡Que miras! —la retó antes de irse.

—Esto es el colmo Karin, no puedes estarle rogando a esa muchachita. —Pensaba después un poco más calmada—Que haga lo que se le dé la gana, la dejaré en paz, soy demasiado para ella—intentaba convencerse pero en el fondo sabía que tenía que hacer.

—No, no lo voy a hacer, yo no tengo la culpa, ella me saca de mis casillas con sus idioteces de niña boba —se intentaba justificar—No, yo no le voy a pedir disculpas, ella también tiene la culpa. Igual es ella la que me necesita, ya aparecerá o volverá a caer de nuevo, es cuestión de tiempo... —intentaba convencerse.

—Karin, Karin—venían sus compañeras felices de verla.

—Hola Karin, te estábamos buscando, el teacher de Química no ha dejado ardua tarea... ¿por qué no fuiste a clase?

—Estaba ocupada. —les respondió cambiando su cara hipócritamente.

— ¿Con el chico que salías? —preguntó una de las muchachas picaronamente.

—No, con ese no... —no podía fingir más, su rabia ahora se había convertido en impaciencia.

—Ah, ¿ya lo cambiaste? —Se asombró y decepcionó la otra chica al mismo tiempo.

—Más o menos...

—y entonces ¿cuándo nos presentarás al afortunado? —volvía la otra.

—Por lo pronto no chicas, luego me dicen qué hay que hacer de tarea, me tengo que ir—les dijo intentado ocultar su estado de ánimo.

—Pero K íbamos a hacer el taller de Trigonometría... —le recordó una de ellas.

—Lo sé, pero en esa me va bien, además tengo que ir a preparar mis cosas para el viaje, así que...

—Pobrecita, se nota que estas re estresada—Opinó una chica.

—Aja —asintió ella agradecida —sí, lo siento chicas, el sábado vamos a representar nuestra academia y yo aún no me sé bien la coreografía, mi maestra ya se libró echándome a mi toda la culpa si es que perdemos...la vieja hija de puta... —insultó recordando a su exigente mentora.

—Eso es injusto, tú tienes que estudiar y las demás no lo hacen—la apoyó una de las chicas.

—No importa, yo siempre me las arreglo, ya verás. Bueno ahora si me voy niñas, adiós — se despidió de beso y las chicas casi que la llevan cargada al estacionamiento.

***

—Gio, ¿qué te pasó? —se intrigó su compañera cuando ya estaban a punto de iniciar la clase.

—¿Eh? —dijo ella sin entender y la chica le señaló su cara.

— ¿Qué?

—Eso. —Le mostró más exactamente sus mejillas.