James detalló a Giselle, quien le cantaba a sus trillizos alguna canción que ella misma había escuchado, se cuestionaba cuando fue que terminó aceptado aquel sentimiento por la pelirroja, pero sabía que tenía mucho que ver con sus pequeños demonios...
La burla que se ganó James por su torpe halago duró dos semanas, mismas que fueron un infierno hasta que Luna y Walburga se compadecieron después y regañaron a todos por hacer sufrir al de lentes.
Gracias a esa burla, James se ocultó en su despacho y solo salía si era sumamente necesario o si Luna ingresaba con un palo en la mano y una mala mirada en sus hermosos ojos celestes.
En aquellos momentos, James estaba haciendo un plan de cortejo para Lady Hufflepuff. Oh sí, él, Lord James Charlus Potter, líder de la noble y ancestral casa Potter, estaba haciendo un elaborado plan para cortejar a la hermosa Giselle y no estaba dispuesto a dar un paso hacia atrás, aunque estaba más que nervioso.
Llevaba dos pergamino de un metro en la basura, sus nervios y ansias estaban empeorando y sabía mejor que nadie, que si sus nervios predominaban; todo acabaría mal. Trata de mantenerse tranquilo, cuando la puerta es tocada y por ella, Augusta Longbottom ingresa.
- ¡Mi señora! - exclama James, poniéndose de pie y ayudando a la dama - ¿Por qué no me avisó que venía? Pude haber preparado té para usted y alguna golosina
- Oh muchacho cálmate - pide la dama mayor, una vez que ya estaba sentada - He venido aquí por tres motivos muy sencillos
- Claro, dígame - pide James con tranquilidad
- Motivo número uno, este es el resultado de los nuevos métodos de enseñanza y debo de decir que estoy orgullosa - sonrío encantada Augusta, ganando así una tímida sonrisa de James - El segundo punto es sobre la convocatoria para nuevos fotógrafos para la editorial, requerimos tus Firma en unos documentos y el tercer motivo es que... Marlenne Mckinnon me acaba de contactar, está de vuelta y quiere ver a Harry, su ahijado
James dejó los documentos en su escritorio, y observó a la mayor, ¿Qué significaba aquello? Hacia tiempo que no sabía nada acerca de la rubia y no es que intentara contactarla, sino que después de que Sirius había terminado con ella y fue antes de que Harry naciera, por eso no estuvo cuando se escogió a ma madrina.
- ¿Qué es lo que quiere en realidad? - cuestionó curioso James
- No se, y no me gusta no saber - bufa Augusta - Solo estate al pendiente querido, por favor, porque esa chiquilla no me agrada
James suspira y asiente, sabe que esto podría salir muy mal, pero al mismo tiempo debe de tener mucho cuidado.
- Gracias por avisarme - dice James
Augusta ya no dice nada, simplemente asintió y dejó que el azabache siguiera firmando los documentos que estaban frente de él.
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La llegada de los nuevos fotógrafos que estaban extasiados por ayudar a la famosa editorial, por lo cual, James estaba terminando de acomodar a todos los nuevos reclutas que emocionados; aceptaban los trabajos encantados y emocionados.
- Después de llenar los papeles, recibirán su gafete con nombre y foto, mismos que son un translador así que tengan cuidado con perderlos - pide James, para después observar a los jóvenes aspirantes, la mayoría de ellos eran nacidos de muggles - ¿Entendieron?
