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173.2

Capítulo 173: El chip se reactiva [Parte 2]

Sin embargo, la pérdida de conexión solo le sucedió a las personas dentro de un radio de diez metros. Los comunicadores más lejanos todavía estaban bien.

Cuando Qi Geyou estaba a punto de enviarlos un poco más lejos y ver si los comunicadores se recuperarían, el comunicador en sus manos de repente dejó escapar un zumbido rítmico al mismo tiempo. Fue seguido por una voz enojada e impaciente.

"¡Lung, habla!"

Sólo había voz y ninguna imagen.

Qi Geyou pensó que la voz era un poco familiar. Fue cuando vio a Lung recoger apresuradamente un comunicador de una persona cercana que recordó que era del gato gris.

"Resuello, ¿tienes algo sobre Cillin allí?" Lung preguntó apresuradamente.

"¡Miauf*cker! ¿Cómo puedo saber si estoy tan lejos? En cualquier caso, no hay señal de GPS en absoluto, ¡ni siquiera en lo más mínimo!" rugió el gato gris.

Las personas que tenían comunicadores cerca se alejaron rápidamente del área.

"Tampoco pude encontrar su señal de GPS desde aquí". Lung se secó la cara agitadamente.

Dile a tus robots que me envíen. ¡Lo buscaré!"

Lung se sorprendió por un momento al escuchar las palabras del gato gris. Rápidamente se recuperó y dio una orden a los robots en la nave estelar.

Después de realizar una verificación de largo alcance de la identidad de Lung, una de las bellezas robóticas en la sala de control llevó al gato gris hacia un pequeño avión espacial. No rechazó al pequeño perro del infierno cuando quiso venir. En este momento, cada persona era una mano amiga adicional. No era que el gato gris menospreciara al resto de las personas en el planeta, sino que sus habilidades nunca satisficieron al gato gris en primer lugar. ¿Cómo podría esperar que las personas que eran tan débiles que podrían ser asesinadas de una bofetada como un pollito hicieran algo? Debería haber seguido a Cillin en ese momento. Que lamentable error.

Esta fue la primera vez que el pequeño perro del infierno vio a tantos humanos desconocidos. Aunque no tenían el olor de su presa, el pequeño perro del infierno seguía siendo extremadamente cauteloso. Mostró sus colmillos y dejó escapar gruñidos bajos de su garganta por costumbre casi en el instante en que olió el gran grupo de olores desconocidos fuera de la nave cuando se abrió la puerta de la cabina.

Sin embargo, no llegó a gruñir más de dos veces antes de que el gato gris lo detuviera de un golpe: "¡Por ​​qué maullido estás gruñendo! ¡Sígueme!"

El pequeño levantó la nariz antes de salir tentativamente del avión espacial.

Caminaba a cuatro patas como de costumbre, pero ahora vestía ropa y se veía un poco mejor que antes. Cillin incluso había abierto un agujero en sus pantalones para que su cola pudiera salir y se ajustara a los estándares del pequeño.

La combinación de un gato y mitad perro-humano atrajo mucha atención cuando salieron. Sin embargo, dado que todos eran 'Serpientes voladoras' y Qi Geyou había notificado a todos con anticipación, no habría una conmoción demasiado grande.

El gato gris no se entretuvo. En el momento en que vio a Lung, enderezó la cola y se preparó para correr hacia la prisión. Al final, Lung tomó prestado un auto volador de Qi Geyou y llevó a los dos compañeros a la prisión.

Como no sabían exactamente en qué área de la prisión estaba Cillin, no estacionó el auto al llegar a la prisión. En cambio, condujo el auto alrededor de la prisión. Con el gato gris y la nariz del pequeño sabueso infernal, creía que esta forma de moverse sería más efectiva.