Operación Kimchi jjigae (MarkHyuck) +18

Quinceavo plato

Haechan estaba de lo más insoportable. Mark estaba apretando los dientes, lo único que quería era dormir, estaba cansado. No había sido una buena idea haber invitado a Donghyuck a su habitación, ah, pero tenían que levantarse temprano para poder ir a la grabación del 6to aniversario de Dream.

Mark volvió a despertarse cuando sintió los dedos impacientes de Haechan, le acariciaban el brazo con suavidad, Mark se había volteado de lado, pero Haechan lo siguió para quedar cara a cara. Tuvo que bostezar para que el sueño se fuera.

—Donghyuck. —Mark lo regañó con una voz ronca e impaciente.

—Despierta. —Haechan sonrió se estaba quejando, sacudió a su amigo y se pegó más a él.

¡Y es que Haechan había dormido bien mientras iban en su camioneta, por eso no estaba tan cansado como Mark lo estaba, y eso que compartían el mismo horario. Deberían estar igual.

—Déjame. —Mark bostezó y volvió a dormitar de nuevo.

Pero Donghyuck no tenía la intención de dormir, quería atención, quería que lo vieran, quería tener sexo esa noche, no sabía cuándo volvería a tener. Faltaban los conciertos de Tokyo y todavía debían de ensayar para el comeback de 2baddies.

Abrazó a Mark, envolvió sus brazos alrededor del mayor en un fuerte abrazo y presionó su cara en el hueco del cuello de Mark, besando con suavidad la suave piel.

—Por favor. —Haechan le pidió. —Algo rápido. Te trataré bien.

Mark pudo sentir los dientes de Donghyuck sobre su piel, así que abrió sus ojos al pensar que podría haber dejado una marca en su cuello. Pero al ver los ojos abiertos de Mark, Donghyuck tomó sus labios y lo besó profundamente.

Mark echó su cabeza para atrás y observó a Donghyuck. ¿Por qué siempre hacía lo que quería? ¿Por qué siempre ganaba? ¿Mark era tan débil?

—¿Ya estás despierto? —Haechan le preguntó con una sonrisa divertida.

—Sí. —Mark gruñó en voz baja porque aún se sentía cansado. —¿Qué hora es?

—No sé, tarde. —Haechan dijo mientras se restregaba un poco en su "pareja".

La sonrisa de Haechan era peligrosa, era suave y deseosa, Más con los movimientos lentos al lado del cuerpo de Mark. Allí fue cuando lo sintió. Donghyuck estaba tan duro, su pene se presionó contra la cadera de Mark. Podía sentirlo a través de los suaves shorts que usaba el canadiense.

—No voy a tener sexo contigo. —Mark rodó los ojos y se giró de nuevo.

—Es que no es mi culpa que te veas tan sexy mientras duermes y me ponga duro solo con pensarte. —Haechan sonrió. —Si te sientes cansado, déjame hacer todo el trabajo a mí.

Mark arrugó sus cejas y soltó un suspiro. Haechan era tan...

—Donghyuck, por favor. —Mark observó los dulces ojos de Donghyuck, no podía decirle que no, especialmente cuando lo pone caliente también. —¿Por qué haces esto?

—Sé que quieres, anda, ahora. —Haechan le dijo y Mark tenía un mal presentimiento, no sabía si era porque creía que iban a despertar a todos o porque Haechan empezó a quitarle el short a Mark y a quitarse el suyo.

Realmente no había forma de que Haechan se detuviera una vez que quería algo. Mark sintió los labios de Haechan sobre los suyo y le besó profundamente, era tan fácil para el cuerpo de Mark reaccionar cuando Haechan estaba cerca, demasiado cerca, no tardó más que unos cuantos minutos para saber que él también estaba duro.

—¿Qué pasa? —Mark le preguntó a Haechan cuando éste se detuvo de repente.

—Déjame tomar el control. —Haechan dijo de repente. —Y sabes que no me refiero a moverme, quiero entrar en ti.