Operación Kimchi jjigae (MarkHyuck) +18

Trigésimo tercer plato

Cuando Mark llegó a su departamento se dio cuenta de que Haechan estaba en su habitación, ¿Qué hacía allí? ¿No había ido a casa a descansar por las vacaciones del año nuevo chino?

—No sabes lo mucho que te extrañé. —Mark quería acercarse y abrazar a Donghyuck.

En lugar de hablar o de dar una respuesta, Haechan se volteó hacia Mark y lo inmovilizó contra la pared, presionó sus labios contra los del canadiense con dureza, casi hiriendo su boca.

—¿Te divertiste? —Preguntó Donghyuck con un tono molesto. —Vi la forma en la que abrazabas a Yuta, vi la forma en la que lo mirabas, en la que te reías. ¿Cómo crees que eso me hizo sentir?

Y Mark sintió un ligero shock. ¿Qué estaba pasando?

—Sabes que no tengo ningún sentimiento por él. Es parte del performance.

—¡Claro que no! —Donghyuck lucía colérico. —¡Él te desea, él te abrazaba, ponía sus piernas sobre ti, te dejaste abrazar y tocar por él! ¡Y yo soy quien debería hacer eso!

—Estás siendo ridículo, Haechannie. No pasó nada entre nosotros en toda la gira. Te lo juro. —Mark parecía sorprendido. —¿Por qué estás así?

—Por que eres mío. —Negó con la cabeza.

Donghyuck no era una persona agresiva, jugaba por molestar, pero esto era muy diferente a lo que Mark pensó que pasaría cuando regresara a su habitación, a su departamento y a Seúl. Ahora Haechan lo atraía hacia él enrollando su brazo en la cintura del líder de Dream.

Mark casi dudó, había extrañado tanto a Donghyuck, había personas atractivas, pero él jamás miró o siguió la corriente de alguna solo porque sabía que tenía alguien en casa esperándolo. Y con Yuta y Taeyong era muy diferente, ellos eran sus amigos.

Mark cedió, y comenzó a devolverle el beso, fue turno de Mark tomar el control, así que cuando oyó un gemido de Haechan en su boca, Mark lo empujó contra la puerta, apretando su cuerpo contra el del moreno.

Haechan retrocedió, pero esos ojos juguetones cambiaron, él se desabrochó su camisa y la dejó caer al suelo antes de quitarle la playera al canadiense. Luego Donghyuck empujó a Mark sobre la cama y se mordió el labio mientras miraba. Mark siempre se quedaba sin palabras cuando Hyuck estaba a su alrededor.

La mitad superior de los cuerpos estaba expuesta, pero Mark no era paciente, así que giró a Haechan subiendo encima de él y comenzó a besarle la boca de nuevo. Apoyó su peso en uno de los codos al lado de la cabeza del moreno, mientras con la otra mano, buscaba el pecho del moreno.

Haechan gimió y Mark sintió que las uñas del moreno se habían hundido en su espalda, todo por unos simples besos en la unión del cuello y los hombros del moreno.

El mayor jugó con las tetillas, Haechan era demasiado sensible de esa parte, así que dejó escapar un gemido estrangulado. Su boca se estiraba en una sonrisa. Maldita boca, maldito hombre tan sensual, lo había extrañado tanto, casi un mes sin verse.

La boca de Mark siguió a su mano y sus labios se cerraron alrededor de uno de los peones del moreno, su lengua lo rodeaba con intensidad. Y Mark empujó sus caderas con fuerza contra las de Hyuck para que ambos empezaran a emitir pequeños gemidos.

—Recuerdas que eres el único que puede ponerme así de duro ¿Cierto? —Mark presionó su erección contra Donghyuck a través de sus pantalones. —Y te encanta provocarme. —Mark enojado era sexy. Haechan colocó su mano justo sobre el sexo de Mark y lo apretó.