|||𝐎𝐧𝐞-𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬.|||²

Kaname Kuran (1/?).

|Amor Humano.|

● Pareja: Kaname y tu.
● Personaje: Diana.
● Anime/manga: Vampire Knight-Guilty.

"Luego del despertar de Yuki ocurren sucesos que nadie se esperaba: la princesa purasangre decidió quedarse sola y conocer a su verdadero amor.
Dejando destrozados al ancestro purasangre y al último cazador del clan Kiryuu.
Ese fue el suceso más sorpresivo para los que son cercanos a los tres protagonistas, pero un nuevo suceso ocurre y éste no solo deja sorprendidos a aquellos que son cercanos a los protagonistas; el rey del los vampiros, un ancestro y quien solo parecía entregar su corazón a la única princesa vampiro, al parecer decidió aceptar esta nueva oportunidad y dejó su corazón en manos de una humana, pero no solo eso sucede. Algo más ha sucedido en el primer encuentro del ancestro y la humana".

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El vampiro vagaba totalmente desorientado por una ciudad con aire de Inglaterra, edificios antiguos medianamente modernos, la noche era iluminada por las lámparas en las calles que le daban elegancia al lugar.

Veía ir y venir a las parejas tomadas de las manos, sonriendo, amandose. Así podría estar él pero no.

Ahora que la mujer que siempre amo había decidido estar sola, por quien siempre espero, por quien lucho y sacrificó todo, qué haría?.

Fue dependiente a un amor que creyó seguro en el futuro.

Que iluso fue.
Eso jamás lo vio venir.
Se esperaba que ella eligiera a su rival pero no. Eligió quedarse sola.

O eso aparentaba.

Ya que luego de tomar esa decisión ella a veces no lo trataba como a un hermano, como ella dijo que haría, si no que coqueteaba pero luego le rompía sus ilusiones con un "te quiero hermano, eres mi familia".

Eso le dolía. Parecía que jugaba con él.

Suspiro tomando de golpe el alcohol en su vaso. Estaba en un bar donde al parecer había una fiesta.
El jazz y a veces la musica moderna se escuchaba desde lejos.
La gente bailaba o estaba sentada literalmente comiendose las unas a las otras.

-mal de amores amigo? -el barman le sirvió nuevamente y lo miro con amabilidad.

Kaname solo lo miro de reojo y balanceo su vaso, flexionando su brazo y apoyando su mejilla en su mano.

-la mujer que siempre espere...decidió quedarse sola y...ahora no sé qué hacer, ella siempre fue mi luz -susurro con el ceño fruncido y sin darse cuenta que el alcohol ya estaba haciendo efectos en él, extraño siendo un ancestro.

El hombre solo negó con la cabeza y miro alrededor suyo.

-hombre, no pienses en cosas que te depriman, hay miles de mujeres bonitas en este lugar, por qué no olvidas todo por una noche y la pasas bien?, noto en ti que siempre fuiste alguien que sigue las reglas.

Él siguio haciendo su trabajo dejando a Kaname pensativo. Que miro de reojo a las personas y sonrió de lado al ver que había varias mujeres que lo estaban comiendo con la mirada sin pudor.

Paseo su mirada por los rincones hasta que un olor embriagante hizo alargar sus colmillos.
Apretó sus labios con fuerza y sus ojos se estrecharon peligrosamente buscando a esa persona con tal aroma.

Cabello largo marrón rojizo, piel blanca como la nieve. Cuerpo de diosa, que lo hizo apretar el vaso en su mano. Trasero firme, senos perfectos para llenar sus grandes manos. Piernas largas, indicadas para rodear su cintura.