𝑫𝒓𝒂𝒘 𝒎𝒆 | 𝑆𝑒𝑜𝑛𝑔𝑆𝑎𝑛𝑔

✏️Sexto dibujo y por más𓂃 ִֶָ ִֶָ

Había pasado una semana desde la noche que pasaron juntos. Seonghwa se había decidido a enfrentar al menor, iba a ser directo para decirle sus sentimientos y no dejaría que el menor se escape. 

Tomó las últimas gotas de la gaseosa y caminó rumbo al lugar donde se conocieron, aquel árbol que tanto había visitado en este último tiempo.

Allí estaba, Yeosang sentado en una manta, son su pequeño lienzo y pinturas. Estaba inmerso en su mundo.

Seonghwa lo admiraba desde lejos, era precioso. Aquel rubio habia conquistado su mente y corazón como nunca antes se hubiera imaginado. Desde el primer momento provocó algo en él y con el tiempo fue creciendo en su interior, sentía una gran calidez en su pecho y la felicidad rebalsaba dentro suyo.

Tomó aire y lo mantuvo unos segundos para luego soltarlo en un gran suspiro. Finalmente avanzó los últimos pasos para estar frente al chico.

-Cheonsa, hola - el menor levantó la vista rápidamente y sonrió.

-¡Seonghwa hyung! - dejó el lienzo y el pincel a un lado para ponerse de pie - ¿Cómo está?

-Bien ahora que te veo - Esa tarde se prestaba más hermoso y pasible de lo normal, esto hacia parecer como si estuviera soñando por lo hermoso que se veía el rubio.

-¿Que dice hyung? - Yeosang bajó la cabeza al suelo para ocultar la rojez en sus mejillas.

-¿Más tarde debes hacer algo? - Preguntó al fin.

-Creo que no - responde el menor - ¿en que pensaba?

-Quiero llevarte a un lugar especial, si me lo permites - Extendió su mano hacia el rubio y, como respuesta, este copio la acción haciendo que se tomen de las manos.

Juntaron rápidamente las cosas del menor y caminaron hacia una colina que había en aquel gran parque. Estaban alejados de todas las personas allí presentes.

-Esto es hermoso hyung - comentó el rubio.

-Sí, es hermoso - confirmó el mayor mientras admiraba al chico a su lado.

Era ahora o nunca.

-Yeosang... - El menor volvió su vista a su contrario, sintió esas famosas mariposas en el estómago al ver la imagen de seonghwa tomando de su mano y mirándolo con ternura, parecía como si alguna aurora de luz lo rodease e hiciera la imagen perfecta - ¿Sabes que te tengo mucho cariño, verdad?

Yeosang asintió lentamente mientras miraba sus manos entrelazadas con cariño - Yo también lo aprecio mucho.

-Eres alguien especial - Elevó su mano libre para acariciar la mejilla del rubio, este al sentir el toque volvió su vista  hacia el azabache - Desde hace tiempo quiero decirte algo y no he tenido el valor de hacerlo - El menor podía percibir la delicadeza y dulzura que Seonghwa utilizaba para cada palabra, estaba hablando desde su corazón.

-Dime - Pidió el menor en un susurro pero audible para el contrario. 

-Me gustas Kang Yeosang - el rubio no pudo evitar abrir grande los ojos al escuchar esas palabras - Eres una de las personas más especiales que conocí, haces que cada segundo a tu lado sea especial y único - Los ojos del mayor tenían un brillo especial y el menor podía verse en ellos - Contigo siento que soy la mejor versión de mi mismo - Dio un paso dudoso, para acercarse más al contrario, al ver que este no retrocedió siguió hablando - He llegado a pensar que tal vez no era merecedor de estar a tu lado... - Apartó su mano del rostro del rubio para ahora peinar un mechón que caía tapando su tan preciosa marca de nacimiento - Pero quiero serlo y por eso me esforzaré.

-Seonghwa... - susurró y el mayor lo acercó más a su cuerpo, sus rostros estaban a escasos centímetros el uno del otro, podían sentir la respiración del otro chocando en sus bocas.

Yeosang mentiría si dijera que no se sentía cómodo. Cada movimiento, palabra y mirada del contrario eran delicadas y llenas de cariño. Quería estar ahí. Ambos bajaron sus ojos hacia la boca del otro, embriagados por la tentación de unirse en un beso.

-¿Puedo... Puedo besarte? - Pidio el consentimiento del contrario antes de seguir avanzando. El menor asintió lentamente - Necesito palabras Cheonsa.

-Besame, hyung.

Y esas palabras bastaron para que el mayor tomara el rostro del rubio y uniera sus labios en un delicado y suave beso. Tal contacto se sentía correcto para ambos, una explosión en sus interiores hizo que se quisieran aferrarse más el uno del otro. Al principio sólo fue un tacto pero el menor comenzó a mover sus labios para profundizar más el beso, cosa que el azabache siguió con gusto.

Luego de un rato se separaron y, al abrir los ojos, se vieron el uno al otro. El amor se podía sentir a kilómetros. Seonghwa le sonrio y Yeosang le devolvió aquella acción.

-También me gustas, Seonghwa hyung - Dijo aún sosteniendo la mirada y pudo ver como una pequeña lágrima aparecía en la mejilla del azabache - ¿Porque llora? - Preguntó preocupado.

-Lloro de la felicidad, Cheonsa - Lo abraza fuerte pero no tanto como para que sea incómodo. No pudo evitar oler el cabello del contrario, olía a chocolate. Era adorable.

-Se siente agradable - comentó el menor contra el pecho del contrario, mientras abrazaba la cintura de este - Me hace feliz, hyung - Dijo para luego mirar hacia arriba y encontrar los ojos del azabache, este no pudo evitar robarle un piquito que hizo reir a ambos.

Se quedaron un tiempo más en aquella colina, su colina. Se sentaron y pasaron el tiempo juntos una vez más pero algo agradable los rodeaba.

Yeosang decidió dibujar algo pequeño y guardarlo para recordar ese día como algo especial. Tomó su lápiz y cuaderno para dejar pequeños trazos en la hoja. Era imposible poder dibujarse a ambos ya que necesitaban verse desde otra perspectiva asi que optó por algo más sencillo pero igual de especial. No tardo tanto y amó hacer cada detalle, todo encajaba perfecto porque no sólo estaba dibujando a su amado, estaba dibujando su amor y la unión que ahora compartían.

Al terminar,no pudo evitar reírse por lo bajo.

-¿De que te ríes, Cheonsa? - Preguntó Seonghwa curioso.

-Pensar que todo empezó con un simple dibujo...

♡♡♡

Gracias por leer, espero hayan disfrutado de esta pequeña historia n.n