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─Escapa conmigo esta noche, Katsuki.
Dabi termino por acorralarlo, su aroma a cigarro con algo de colonia varonil le fundió los sentidos de Katsuki, solo se concentró en el Alfa.
─Por favor... ─murmuro. Los ojos azules de este tomaron un tono más oscuro, volviéndolos atrayentes.
Los felinos ojos rojos de Katsuki se dilataron ante la imagen.
Dabi sólo quería fugarse de casa con el omega de su hermano y tener sexo todo la noche con él bajo un manto de estrellas.
Robarse al novio de su hermano no sería lo peor que a hecho, pero le excita más que nada la sola idea de hacerlo con el pequeño omega rubio ceniza.
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La familia Todoroki estaba de cabeza, todo era un rompecabezas de mil piezas, y él no iba a reparar el desastre que hizo su padre.
Tomo su chaqueta saliendo de la gran mansión de lo que era su antiguo hogar, odiaba dejar a su madre llorando y a sus demás hermanos consolándola, pero no podía seguir ahí, sabía que si se quedaba más tiempo, terminaría por arruinar todo.
Pero antes de irse, notó al omega de su hermano ir al jardín, específicamente, al laberinto de rosas que su padre mando a construir para su madre cuando estaban recién casados.
Ajusto su chaqueta y siguió los pasos de Bakugo.
Tomo una rosa y se la ofreció, le dijo aquello, y rogó como un Alfa como él que no ruega a un Omega para que le cumpla su petición. Estaba dispuesto a rebajar su estatus de élite con solo tener esa noche al noble Omega.
Y Bakugo acepto.
Luego de aquello, ambos lograron escabullirse y subirse al hermoso auto de escaparate rojo brillante de Touya, la adrenalina subiendo por las venas de Katsuki ante el riesgo de ser descubiertos.
No importaba nada más.
O al menos eso Dabi sentía al ver que el lindo Omega, Bakugo Katsuki, estaba con las manos hacía arriba sintiendo el aire fresco chocar contra su rostro y desordenando el cabello y la Luna con miles de estrellas encima de ellos.
Viajaron mucho, la hora dejó de importar cuando apagaron los celulares debido a las llamadas insistentes de todos.
Las nuevas calles les abrían paso, algunos establecimientos estaban abiertos, como un restaurante de fideos Soba. Ellos pidieron un par de platos.
