Capítulo V Volveré

7 0 0
                                    



El sol entraba por la ventana de la habitación de Ethernia, mientras ella se levantaba de la cama para correr a su armario, era un día para salir e ir a comprar cosas que se le antojaran, tomo de su armario un vestido azul oscuro y una hermosas botas, se disponía a salir cuando un fuerte viento a soto en contra del castillo y este entro por la ventana para revolver las hojas que Ethernia tenía sueltas en un pequeño escritorio, aquella mujer de piel clara y largo cabello dorado, con un par de ojos color lila que resaltaban aún más su belleza, estaba dispuesta a divertirse, pero no podía salir así, tenía que usar una capa con capucha para ocultarse, no quería llamar la atención de las personas equivocada.

Dispuesta a salir del palacio, para adentrarse a la verdadera vida del reino de Mercia, camino por uno de los mercados más grandes del reino, este abarcaba desde el centro y culminaba en el puerto del reino, era toda una aventura estar en este mercado, había frutas de todas clases, verduras, pan, queso, carne y al llegar al puerto había mariscos por todos lados.

_Disculpe, me podría dar tres libras de camarones, por favor. Pedía con gentileza Ethernia.

_Sería una moneda de plata, lady. Respondió el vendedor mientras la miraba de pies a cabeza.

_Gracias. Respondió Ethernia para después alejarse del puesto.

Mientras acumulaba comida en una canasta que había comprado al inicio del mercado, se acercó al puerto y con nostalgia miro el barco donde había llegado hace ya varios años atrás, mientras contemplaba la vista del mar ante sus ojos, una el viento golpeaba su rostro, cuando menos se lo esperaba el aire logro hacer que su capucha de su capa se callera y dejara al descubierto su hermoso cabello dorado.

_Un hermoso día, para apreciar tan majestuosa vista, ¿no lo cree? Preguntaba un apuesto hombre misterioso.

_Siempre es un placer ver la majestuosidad del océano. Respondió Ethernia mientras dirigía su vista al misterioso hombre.

_Permítame presentarme, mi nombre es Eliot. Respondía aquel hombre apuesto.

_ ¿Eliot? Un nombre no muy común para un hombre. Respondió Ethernia, con algo de asombro, en el interior al escuchar ese nombre le vinieron miles de recuerdos de cuando estuvo en la torre de fuego, pero no podía ser posible, aquel día Ares había asesinado a todos.

_Eso me han dicho, aunque aún no me dices cuál es tu nombre. Insistía Eliot, acercándose un poco más a Ethernia.

_Veo mucho interés en saber mi nombre, mi nombre es Miridiel, pertenezco a la servidumbre del palacio. Respondía Ethernia mientras volvía a subir su capucha.

Cuando estaba por irse del lugar llego una mujer, de piel oscura y cabello ondulado, era hermosa pero cuando paso junto a Ethernia pudo contemplar aquellos ojos de color gris claro, no podía ser, inmediatamente recordó a Alba, aquella niña que la había dicho que serían amigas. Cuando estaba por irse del lugar aquella mujer misteriosa le habla.

_Ethernia, hace mucho tiempo que no te miraba. 

_No puede ser, eres Alba y él es Eliot? ¿Cómo es posible? Preguntaba Ethernia, confundida.

_No fuiste la única que sobrevivió aquel día, Lara nos salvó, lastimosamente no pudo ir por ti, de hecho creíamos que estabas muerta, hasta hace poco, que escuchamos hablar de una bruja de cabello dorado y ojos color lira, tenías que ser tú. Respondía con alivio de que estuviera viva.

_ ¿Qué es lo que están haciendo aquí? No entiendo. Preguntaba confundida Ethernia.

_Ocupamos de tu ayuda, así que tendrás que acompañarnos, de nosotras dependen muchas vidas. Respondía Alba mientras tomaba las manos de Ethernia.

ETHERNIA WAR OF THE GODSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora