El Hilo Dorado

Después de 15 Años

15 años después de que Mirabel se fuera y de que Casita se derrumbara, fuera reconstruida y de que la magia regresará, la familia Madrigal fueron mejorando su relación entre ellos y dejaron de ayudar tanto al pueblo, comenzaron a relajarse y a pasar más tiempo entre ellos, unos tres años después del derrumbe Dolores, Isabela y Luisa se casaron con los hombres de los que se enamoraron y las tres mujeres se convirtieron en madres tiempo después.

Dolores se casó con Mariano Guzmán y tuvo cinco hijos con el, los mayores, los mellizos Thiago y Anna, el tercero Samuel, la cuarta Bia y el más pequeño José.

Isabela se casó con un jardinero del pueblo llamado Adam y tuvo tres hijos con el, las gemelas e hijas mayores Lia y Dina y el menor llamado Ruben.

Luisa se casó con un escultor del pueblo llamado Diego con el cual tuvo cuatro hijos, el mayor llamado Benjamín, el segundo llamado David, el tercero llamado Aaron y la cuarta hija llamada Tany.

Camilo también se casó pero con una mujer que era dos años mayor que el y con la cual tuvo dos hermosas niñas, la primera llamada Tamar y la segunda llamada Mara, pero lamentablemente su amada esposa murió segundos después de dar a luz a su segunda hija, y dejando a Camilo solo con las niñas y el resto de la familia Madrigal.

Antonio no se casó pero si se enamoró de su amiga Cecilia con la cual tiene una relación desde los 15 años y espera que ambos cumplan 21 para poder pedirle matrimonio y casarse finalmente con ella.

En la familia Madrigal las cosas fueron mejorando pero la relación entre algunos miembros de la familia se fue volviendo tensa e incómoda y incluso había rencor y odio en algunos miembros de la familia hacia quien antes fue la matriarca de está, Julieta, Isabela y Antonio son los que le tienen un gran odió a Alma por el daño que les hizo a ellos, al resto de la familia y al los dos miembros de esta que estaban ausentes hace mucho tiempo, Julieta no le dirige la palabra a su madre al igual que Isabela y Antonio, mientras que los primos a parte de no dirigirle la palabra a la anciana, son los que pasan más tiempo juntos y son los que mejor se llevan desde que Mirabel se fue de Encanto.

••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

Después de haber salido de Encanto junto a su tío Bruno, Mirabel y el caminaron durante toda la noche hasta que llegaron a la entrada de un pueblo que se encontraba abandonado y quemado, solo algunas casas lograron salvarse casi por completo del fuego, tío y sobrina entraron en el pueblo y después de unos pocos segundos caminando, ambos se toparon con la sorpresa de que no eran los únicos que estaban en el, los dos se encontraron con una hermosa mujer de la edad de Bruno  y con un lindo chico de la edad de Mirabel, después de que los dos se presentarán ante la mujer y su sobrino, Mirabel les dió la idea a su tío, a la mujer y a su sobrino, de buscar pertenencias y cosas personales de la gente que vivió en ese pueblo y salvar algunas cosas, buscar una carreta y meter las cosas que encuentren en ella para luego continuar viajando; después de separarse en parejas y de varias horas buscando cosas que se hayan salvado del fuego, Mirabel, Bruno y la mujer junto a su sobrino, metieron en la carreta que encontraron, todas las cosas que recuperaron de las casas quemadas, la joven Madrigal incluso encontró tres cunas de bebé las cuales le mostró a su tío Bruno, ya que en cada una de las cunas estaba tallado el nombre del bebé que la usaría y los nombres que estaban tallados en las cunas eran el de Bruno y sus hermanas.

Horas después de haber salido del pueblo abandonado y quemado, que además había sido el hogar de la gente mayor del Encanto, Mirabel y Bruno, caminaban a la par con sus nuevos amigos, la joven de anteojos iba junto a Mateo mientras que su tío iba junto a Leila que era la tía del chico; cuando ya estaba por oscurecer los cuatro viajeros se encontraron con mucha gente que había escapado de su hogar, era casi todo un pueblo con varias familias que habían perdido a algún ser querido y que además habían sido atacados por un grupo de guerrilleros, el pequeño grupo de viajeros le ofrecieron a la gente del pueblo que había sido atacado, que los acompañarán hasta encontrar un lugar seguro en el cual puedan vivir, el ahora enorme grupo de gente continuó caminando hasta encontrar una zona en la que pudieran acampar, y cuando encontraron el lugar perfecto para hacerlo, Mirabel se separó de su tío y el grupo y subió hasta la parte plana de un pequeño cerro en donde se arrodilló tomando entre sus manos el carrete de hielo blanco que Antonio le había regalado cuando tenía tres años, la joven ya arrodillada comenzó a rezar y pedirle a su abuelo que la ayude a ella, a su tío y a la gente que encontraron, para lograr encontrar un hogar.