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Habían pasado varios días del incidente

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Habían pasado varios días del incidente. Desde el fatídico día en que su libertad se vio amenazada por los últimos incidentes y la ofuscada presión de Klaus y sus hombres dónde quieran que vayan.

Finn quedó avergonzado por su arranque ese día al notar la puerta arrancada del auto en el lado del pasajero y los indisimulados comentarios de Kol sobre cómo se había salido de control y se propuso matar como una verdadera máquina. Kol estaba siendo cruel. Pero creo que lo hacía más por la causa de la paliza sufrida y su ego chamuscado.

Rebekah y Kol tienen diversos contactos alrededor del mundo, elementos y bienes raíces como cabellos.

Pará Kol las propiedades no eran su principal prioridad a través de los siglos. Si, ha ido obteniendolos según caprichos pero nunca al grado de Rebekah, para ella las propiedades eran comodines en un juego bien jugado, si te sabías mover en este mundo de persecución.

El segundo continente testigo de su fuga fue Oceanía. Abordando a Australia.

Los tres llegarían por separados. Kol preocupándose cuando su hermano mayor suicida no lo hace en el tiempo que acordaron. No es que lo demuestre, sólo no quería cargar con la culpa de la posible muerte de ese idiota.

-Estás pensando demasiado hermano.- Rebekah toma un sorbo de su trago. El sol golpea delicadamente sobre su piel, no lo siente como quisiera, pero sus mejillas toman un tierno sonrosado por el largo tiempo de exposición.

Ambos están en una finca alquilada. Era hermosa y tenía un hermoso panorama del atardecer en colores naranjas. El cielo estaba bellamente despejado y el sol se ocultaba detrás de una hermosa hilera de árboles autóctonos que Rebekah no supo ubicar.

Sólo sabía que eran altos, viejos y proporcionaban una exquisita sombra alrededor de la alberca.

-¿Y que quieres que piense?. Pareces realmente relajada sobre el tema.- Masculle sobre la marcha haciendo fondo blanco a su bebida.

Una sonrisa divertida se asoma;-Pareces preocupado al respecto.-

Él se tensa y la mira directamente a los ojos azules y burlones;-El tipo es un inútil, y está completamente desbordado. Quieres pasar desapercibido, pero sueltas al hombre al mundo salvaje como si nada.- Se desinfla sobre la reposera y se lleva una mano al cabello. -No lo entiendo.-

Ella decide apiadarse de su hermano mayor. Aproximándose.

-Está en buenas manos.-

Frunce su ceño. Incrédulo.
-Claro que lo sabrías.- Niega con la cabeza, siempre es lo mismo.

-Nunca preguntaste.- Se encoge de hombros. -Viajó a Madagascar, fue en barco, nostalgia supongo. Recordó a su viejo grupo colonial de conocidos, brujos. Fueron de ayuda en la primera década del siglo XI, cuando Klaus no implataba dagas sobre nosotros aún.-

𝑷𝑹𝑶𝑻𝑬𝑪𝑻 𝒀𝑶𝑼| Rebekah Mikaelson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora