¡𝓜𝓮 𝓬𝓸𝓶𝓲 𝓪 𝓾𝓷 𝓁𝒾𝓃𝓭𝓸 𝓬𝓸𝓷𝓮𝓳𝓲𝓽𝓸! ᴸⁱⁿᵍᶻʰᵘⁱ

11

Wei WuXian miró la puerta y luego tomó los hombros de su pequeño hijo. No parecía alterado, ni nerviosos, solo con su típica sonrisa confiada.

-Ah-Yuan me puedes decir... ¿Cómo se llama ese niño con el que viniste?

Este alfa no era tonto, era realmente evidente que había sucedido algo entre el pequeño zorro y su preciado hijo; sin embargo, resolvería ese asunto luego, debía de centrarse en un problema más grande.

"Él es Jinling"

Dejó de presionar esos hombros y levantó la mirada, comenzó a caminar con dirección a la salida de este humilde lugar.

- Quédense todos dentro, señor Ming porfavor siga cuidando de los niños.

Al finalizar esa oración, cerró la puerta de la casa.

Madam Jin hablaba con su nieto, trataba de convencerlo para que lo acompañara a dar una vuelta pero simplemente el adolescente parecía enfocado en sus propias cosas.

-Madam Jin, espero no interrumpir pero creo que es hora de que charlemos.

La señora colocó una expresión enojada.

El viento soplaba con fuerza creando un sonido vago pero que daba el toque de misterio entre estos dos.

- Sigues siendo igual de imprudente que cuando eras joven.

El señor Wei sonrió, la señora no había perdido ese toque ácido, siguió caminando para estar más cerca de la abuela y su nieto.

- ¡Madam usted sigue siendo igual de radiante!

La señora negó, Wei WuXian siempre había sido así; alagaba, te hacía reír y luego te sacaba la verdad.

- No uses esos alagos, ya estás muy grande como para seguir con esos juegos, se directo, ya no tengo a donde ir.

El rostro del pelinegro no se tensó pero si cobró un aire de seriedad.

-JinLing parece tener 17 años, casualmente son los mismos años que debería de tener el hijo de mi Shijie con Jin Zixuan o me equivoco?

Wei WuXian siempre parecía ser el típico personaje despreocupado y vago pero en realidad era muy perspicaz e inteligente. Madam Jin, solo lo miró y luego acarició el cabello de su nieto. El joven estaba perdido en esta conversación, no entendía quién era ese señor, no entendía como su abuela lo conocía y tampoco entendía como conocía el nombre de su difunto padre.

- No te equivocas, es su hijo.

El alfa mayor no se sintió sorprendido ante lo evidente, más bien se sentía de alguna forma contento, dos personas que se supone habían muerto hace casi 17 años estaban vivas delante de sus propios ojos.

- Me gustaría comprender porque usted se encuentra aquí, en un lugar tan recondito.

La señora dejó de peinar esos cabellos y tomó los hombros de su nieto para caminar con rumbo a la casa.

-Me temo que hay preguntas que no puedo responderte en este momento. No sé cuánto tiempo te vas a quedar pero necesito que tú y los tuyos se vayan.

Wei Wuxian cruzó sus brazos tras su espalda, lamentablemente no podría irse hasta que su amado esposo viniera. Al rato el resto de jóvenes y sirviente salieron de la pequeña casa.

Evidentemente no dió explicaciones de lo que acababa de suceder con la familia Jin, solo cambio de tema y comenzó a molestar a los niños.

Al día siguiente, cuando los niños se fueron junto con el sirviente al colegio, el señor Wei salió y caminó a la casa de la familia Jin, realmente insistirá hasta tener una respuesta.