Capítulo XXXIII

236 16 61
                                    

¡Hola a todos!

Continuamos con la cronología rumbo al gran final.

Ya trataré de no dejar mucho tiempo he estado ocupada y me estresa no subir actualización.

Espero les agrade este capítulo pues hay cosas que ni se imaginan.

Quiero agradecer que tomen una pizca de su valioso tiempo para leer esta historia en un universo alterno.

¡Espero les guste y lean hasta el final!

Pueden agregar a la biblioteca y les llegará la notificación o bien pueden seguirme ya sea por aquí o Instagram (@ferrer_cuellar) En ambas notifico mediante historias o publicación cuando subo el capítulo y cuando me retraso.

NO OLVIDEN DEJAR SU ESTRELLA

Y una disculpa si ven alguna falta de ortografía trato siempre de revisar pero puede que se me vaya una que otra.

¡Gracias por leer!

Capítulo XXXIII

—¿Por qué estás tan enojada? — Como si no lo supiera. — Deja de ignorar me y háblame. Van a pensar que estás desobedeciendo mis órdenes.

—Lo que usted ordene capitán, ¿desea re abastecer el barco en el próximo puerto?

Hace días estaba picado el océano y desafortunadamente Hai y Xen no aseguraron algunos de los barriles. Fue pérdida total de los víveres.

Hemos sobrevivido con raciones limitadas de los cultivos.

—Por estúpidos... ¿En qué ha usado mi tripulación su tiempo? Recién los he notado demasiado distraídos.

— Supuse que dirías eso... ¡bien! Le pediré a Kasumi y Xen que vayamos a surtir todo. Cuento con el inventario. Será fácil capitán.

Solo le respondí por educación y para no ridiculizarlo delante de los demás. No expondría delante de todos nuestros problemas como "pareja" o lo que sea que somos.

Para ser sincera realmente no somos nada... sencillamente somos un par que oculta lo que sea que tienen entre los dos.

—Setsuna no te vayas.

—Simplemente debo ir a cumplir con mis deberes, capitán. Usted disculpe pero su segunda al mando me tiene presionada. — Nabiki todo el tiempo se la pasa jodiendo conmigo. ¡Ya me está hartando! — No tengo tiempo para distraerme en tonterías sin importancia.

No sé qué es más preocupante el hecho de que las cartas de Moroha y Towa son cada vez más cortantes o el hecho de tener todavía a Ranma y Kasumi riéndose de mí y haciéndome caritas irreverentes.

El estrés constante está cobrando factura en mi cuerpo y en mi mente.

— Ignora a Nabiki.

— Para usted es fácil.

De una reverencia rápida trato de alejarme sin evidenciar cualquier fricción existente entre los dos.

—Setsuna. — Lo ignore. — ¡Setsuna!

—Haber, haber, haber ¿estas tonta o que te sucede? — Mi adorado tormento se atravesó en mi camino. — A caso eres mitad pez o que te sucede ¿no estás escuchando tu nombre o qué? Capitán. — Entrelazo su brazo para llevarme de regreso a la proa. — ALTEZA — Justo lo que necesitaba. — Soy yo o usted se está volviendo demasiado blando o simplemente no entiendo que sucede para que aquí la señorita. — Grosera suelta mi brazo y le regala una sonrisa malévola al capitán. — No se detenga al llamado de su capitán... del demonio. — Casi inaudible. — Tonto... el mismo que la tiene aquí dándole conocimiento, viajes, comida, ropa, confianza y es así como la señorita berrinchuda le da por hacerle un desaire de este nivel. ¡Perdóneme! Sencillamente yo no podría tolerar una situación de esa índole. — La extraña energía emitida por ella me empujó enfrente de ellos dos colocándome en medio. — La castiga usted o la castigo yo.

Tiempo al tiempo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora