Capítulo XXIII

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Hola a todos

¡¡¡Capitulo doble!!!

Tarde pero seguro

Agradezco que tomen un poco de su valioso tiempo para leer esta historia en un universo alterno.

Actualización en esta semana antes del domingo.

¡Espero les guste y lean hasta el final!

Pueden agregar a la biblioteca y les llegará la notificación o bien pueden seguirme ya sea por aquí o Instagram (@ferrer_cuellar) En ambas notifico mediante historias o publicación cuando subo el capítulo y cuando me retraso.

NO OLVIDEN DEJAR SU ESTRELLA

Y una disculpa si ven alguna falta de ortografía trato siempre de revisar pero puede que se me vaya una que otra.

Hay actualización 2 veces a la semana con diferencia de días al azar.

¡Gracias por leer

—Si en vez de pelear jugamos...

Acto seguido alrededor de doce a quince marineros del Junco dejaron sus puestos dentro del Tekkosen y comenzaron abordar de nuevo el Junco.

—¿Recuerdas el juego?

—Te exijo que te detengas.

—No seas amargado. ¡VAMOS A DIVERTIRNOS! Tal y como solíamos hacerlo de jóvenes. — Da un gran salto para volar en dirección del Junco. — ¿NO TE SIENTES CAPAZ DE DERROTARME?

Voy tras el y abordo El Junco. —¡ZERO, DEJA DE MANIPULAR A TIAN! ¡¡¡ES UNA MALDITA ORDEN!!!

—¡NO! — Responde atreves de Tian.

Lo golpeo y de inmediato me expulsa dando un gran rasguño sobre el brazo y recolecta una muestra de mi sangre.

—¡A JUGAR!

El Junco comienza a elevarse: en definitiva esto es un juego, un juego bastante peligroso para mi tripulación.

—¡EL PRIMERO EN HUNDIR EL BARCO DEL OTRO ES EL GANADOR! — Carajo.

El Junco avanza y de inmediato elevo al Tekkosen. <<Desea un verdadero ataque naval >>

—ORDENE CAPITAN

—Ya oyeron, esto es un ataque aéreo, los necesito atentos y listos con los cañones.

—Kasumi mantente alejada de la Proa y auxilia a los heridos que logren llegar hasta ti. Nabiki te necesito al frente junto con Hai. Ranma estarás del lado izquierdo con Xen, Ukyo y Nana. Qing te necesito a la derecha con Kou, Lynn y Mao. Setsuna mantente lejos de la zona de impactos y auxilia en lo que puedas sin descuidar a Kasumi. Del resto no recuerdo bien sus nombres pero necesito cinco en la popa y el resto en el sótano, listos para disparar los cañones.
—¡AL FIN LOS USAREMOS! — Dan saltos de alegría. — ¡¡¡DEJENOS MANIPULAR LOS CAÑONES!!!

—¡HAI, XEN! — Dejan de saltar y recuperan la compostura. — Sin conductas infantiles.

—Que esperaba alteza, llevan años queriendo pelear con usted usando armas.

—A este paso espero y nunca vayan a la era moderna... serian felices con armas de destrucción masiva.

—¡SETSUNA NO LES DES IDEAS!

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