Mis manos se deslizaron por la tela, comprobando su suavidad. Abrí los ojos rápidamente y confirme que no estaba en mi cama.
- ¿Señorita Belrose? - Dijo la voz de un hombre.
Moví mis ojos buscando a la persona que me hablaba sin animarme a levantarme.
- ¿ Cómo se siente? - Me pregunto entrando a mi campo visual, era un hombre de unos cuarenta y tantos, usaba unos gruesos anteojos y su rostro estaba cubierto por una fina barba blanca.
<< Mal, muy mal ¿Usted que cree? >> Pensé pero solo pude responderle un débil: Mejor.
Me sonrió, como un padre le sonríe a su hija y comenzó a explicarme lo que había pasado, lo que había echo y las consecuencias. Lo escuche atentamente mientras trataba de no llorar.
De pronto alguien golpeo a la puerta.
- Doctor ¿Como esta Michelle? ¿Podemos pasar? - Pregunto mi amiga asomándose tímidamente a la puerta. Al verme despierta corrió hasta la cama y me abrazo. Tras ella, Paul me miraba preocupado.
- Doctor ¿Mis amigos lo saben?
- No llegue a hablar con ellos sobre tu condición.
- Por favor, quiero contarles yo.
El hombre asintió y salió de la habitación.
- ¿Qué es? - Maggie apretó su mano contra la mía, preocupada.
Paul se adelanto
- Michelle, sabes que si necesitas dinero te lo daré y me hare cargo del bebe sin pedirt...
- ¡Lo perdí! - Grite sin mirar a nadie en particular, las lagrimas comenzaron a caer. - Ya no estoy embarazada - Toque mi vientre con una mano temblorosa.
Maggie me abrazo con fuerza y comenzó a llorar conmigo, levante la vista y me encontré con los ojos de Paul que me miraban paralizados.
- Te libero - Le dije.
** 9 años después **
Una pequeña niña corría por el campo, sus piernitas eran torpes pero solo porque tenía prisa.
- ¡Mamá! ¡ Mamá! - Gritaba
Michelle levanto la vista y vio a su pequeña Jane, corriendo hacia ella. El nombre era puramente irónico, un pequeño recordatorio de que la vida es cruel.
- ¿Que pasa hermosa? - Pregunto cuando la niña llego hasta ella.
- Tia Maggie me regalo entradas para ver a Wings - Se las entrego a su madre - ¿Puedo ir? ¡Por favor!
Michelle miro los papeles molesta, su hija la observaba inquisitiva con esos ojos avellana.
Sus rasgos delataban quien era su padre, aunque Michelle se aseguraba de evitar el tema o cambiarlo siempre que alguien decía "Tu pequeña se parece a Paul Mccartney".
- Claro que puedes ir, hermosa - Respondió revolviéndole el largo cabello negro.
Jane comenzó a saltar rebosante de felicidad, en ese momento llegaba Maggie.
- Ve adentro que quiero hablar con tu tía.
La pequeña obedeció.
- Me parece que no te gusto mi regalo - Maggie sonrió.
- Que graciosa. Sabes que no quiero que lo vea... no quiero que lo sepa.
- Y tu sabes que creo que fue injusto lo que hiciste.
Michelle suspiro molesta.
- Era lo mejor, no quería que cargue con mis errores toda su vida.
- También fue su error... Y uno muy bello.
- Eso es verdad - La joven rubia miro al horizonte como si buscara algo.
- ¿La vas a dejar ir?
- Si, pero por favor que sea solo el concierto y ya. Nada de encuentros sorpresivos. Paul es un hombre de familia ahora y no necesita estos problemas.
Esta vez fue Maggie la que suspiro molesta.
- Esta bien. Solo el concierto.
Michelle abrazo a su amiga y le agradeció por guardar el secreto tantos años.
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Things we said today
Romance¿Nunca dijiste una palabra tantas veces que pierde el sentido?Así se volvió nuestra relación, una repetición de eventos que ya no tiene sentido.Saber, actuar, es lo importante, actuar sin saber es riesgoso y saber sin actuar es inútil. Es por eso qu...
