Eterno, a través del tiempo.

CAPÍTULO 1

Harry observó con ojos como platos, atónitos y desconcertado el cuerpo inerte tirado en el piso del colegio, no, ésto no podía ser real, esto no estaba ocurriendo, estaba soñando, es un sueño, tenía que ser un sueño, no podía ser real " esto no es real " pensó, su expresión era nula, todos sus sentidos colapsaron, no escuchaba ni percibía el tumulto alrededor, la gente corría desesperada, hechizos atravesaban como ráfagas mortales cortando el aire espeso lleno de volutas de humo por las constantes maldiciones arrojadas con furia,

Harry no sentía nada, ni el dolor, ni la sangre chorrear de su brazo, las gotas de sangre caían futilmente contrariada al ambiente frenético a su alrededor, estaba bañando de escarlata el piso frente a sus pies, y aunque su cicatriz le estaba palpitando como un corazón vivo, y que estaba apunto de estallarle la cabeza, él no se inmutó, un estallido se escuchó y un destello rojo iluminó intermitentemente el perplejo rostro del pelinegro , definitivamente esto no podía estar pasando, Gritos y más gritos se hicieron eco a través de las paredes del colegio, él negó débilmente con la cabeza, no aceptando lo que sus ojos le mostraban,

Las rodillas de Harry golpearon precipitadamente el duro piso de un rincón de unos de los corredores de Hogwarts.

- ¿ Hermione...? - babulceo él, incrédulo.

Harry dirigió una mano temblorosa al rostro echado de lado de su mejor amiga, él tenía algo atado con fuerza en su mano derecha como un torniquete para detener el fluido rojo, pero igual sus dedos estaban empapado de sangre, tocó suavemente la mejilla de la castaña , como para no hacerle daño , las yemas de sus dedos recorrieron un lado de su rostro, pero.. estaba fría, Harry detuvo la respiración, algo se alertó en su interior, él abrió más los ojos, se inclinó rápidamente sobre ella y le tomó la cara con ambas manos, ahora la sangre del pelinegro chorreaba por el frío rostro de la castaña,

- Hermione!!!, Hermione!!, - decía Harry mientras la movía frenéticamente, - levántate!!!, - le gritó en la cara, las lágrimas brotaban a borbotones, eran caliente y saladas, sus verdes ojos estaban desorbitados, las lágrimas empezaban formar surcos entre la sangre, la respiración de Harry se volvió jadeante, agitada, él seguía negando, y más lágrimas espontáneas rodaron por sus mejillas,

Afuera el viento se deslizó suavemente entre
los árboles, mientras el fuego cruzado de las maldiciones pasaban sobre sus cabezas.

No, no podía ser real, observó a su amiga con los ojos profundamente cerrados, y sus labios... , sus labios... , advirtió con pánico, Harry negó de nuevo y un terror lo invadió , estaban lilacios, el rosagante color de siempre había escapado, él no caía en cuenta de la realidad.

- Levántate Hermione!!!, levántate de una maldita vez!!!! - le gritó tan fuerte que su garganta parecía desgarrarse, la zarandeo bruscamente, casi salvaje, haría cualquier cosa para que se levantará, no reaccionó, aun de rodillas él la abrazo, y la oprimio contra su pecho, con tanta fuerza como si esperara sentir algún rastro de vida, algún latir vago en su ser, la cabeza inerte de la castaña cayó en el hombro del pelinegro, sus rizos le taparon la mitad de la cara, estaba fría, estaba completamente fría, los sollozos de Harry eran silenciosos, pero dolorosos, sus hombros colapsaron bajo su llanto, él la cogio de la mano, que yacía inanimado a los lados en el piso junto al charco de rojo escarlata del pelinegro, su tacto era gélido , no tenía la calidez de siempre, él apretó su mano, recorrió sus finos dedos que tantas veces había acomodado su rebelde pelo azabache,

- No no no - babulceaba rápido, mientras negaba una y otra vez, como un completo enajenado, él soltó de su mano y la volvió a abrazar, rodeandola entre sus brazos con demasiada fuerza que si siguiera con vida ella había gemido de dolor, porque casi le partía las costillas,