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Narra _____

Dios mio, dios mio, dios mio. Nunca me habia escapado de casa, y mucho menos de noche. Pero valdrá la pena si consigo un novio o a alguien en ese club donde Lia va a llevarme, yo nunca fui popular en la escuela asi que lo pienso ser ahora. Bien, tranquila ____, todo irá bien. Además Lia te acompañara. Escucho de repente que suena el timbre y doy un salto.
Bajo las escaleras corriendo, de seguro que es Lia. Abro la puerta y si, obviamente es ella, y como siempre, bellísima.

-Hola, Lia.- Dije saludandola con una sonrisa en mi cara. Podría decirse que soy su amiga. Con la condición de ser como ella.

-Hola, mocosa.- me dedicó una linda sonrisa. -Estas lista? - me pregunto con mucha energía.

-Sipi, ya estoy lista. Cuanto tiempo estremos en ese lugar? - dije nerviosa, mi madre llega en la madrugada y quiero estar en cama cuando ella regrese a casa.

-Todo saldrá bien, ya verás. - dijo tomándome de los hombros.

-Gracias- dije un poco mas convencida.

Salimos de casa con el paso un poco apresurado. Mierda, ya pasaban de las 9 y quiero estar el mayor tiempo en el club. Pero esta bien. Ya no falta mucho, entonces bajamos la velocidad, en estos momentos me arrepiento de no tener licencia de conducir.
Llegamos a una calle muy oscura donde apenas y se distinguían algunos autos. Pero algo realmente... raro pasó. Cuando pasábamos por un callejón me pareció ver una sombra y decidí voltear rápidamente y por poco logro mi objetivo. Solo logré ver a un muchacho con una capucha blanca y un flequillo tapandole la cara. Solo fueron unos segundos pero pude verlo. Seguramente era algun vago pervertido viendo a Lia. Porque claro, quien quiere verme a mi cuando tengo a Lia a un lado.

En fin, seguimos caminando un rato hasta que alfin llegamos a ese dichoso club. Entramos y estaba justo como lo imaginaba, oliendo a alcohol y parejas en todos lados.

-No puede ser- dije cuando vi a un chico realmente guapo con una copa... estaba solo... en la barra. Era mi oportunidad de ligar con alguien.

Me acerqué a el con muchos nervios intentando parecer segura. Le saludé con un hola y el levantó la cabeza.

-Hola- respondió con una sonrisa.

-puedo sentarme contigo? - le dije sin que pareciera que quería vomitar.

-claro, toma asiento-. Bien... lo mas difícil ya pasó ahora solo...

-hola mi amor, lo siento por tardar tanto.- dijo una chica pelirroja

-Esta bien. Bailamos? - le respondió a la chica.

Claro. Tenía novia, que imbécil soy. Ningún chico tan guapo esta solo en la barra del bar. Dios mio quiero morir, fue una muy mala idea haber venido. A quien engaño, soy tan horrible que moriré virgen, que acaso tan fea soy? Empezé a llorar.
-oh vamos ahora no es momento-dije para mi misma.

Le mandé un mensaje a Lia diciendole que ya me iba a ir.
Tomé un taxi, puesto que el dinero que iba a usar no lo gasté. Llegando a casa me cambie de ropa y me hice rollito con mis sabanas.

No se cuanto tiempo pasó pero me despertó el ruido de mi puerta abierta. Ni si quiera me molesté en voltear pues suponía que era mi madre asi que solo me hice mas rollito y me acurruqué mas en mi almohada.

Jeffrey (jeff the killer y tu) +18  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora