>>---▷♡>>---▷♡>>---▷♡>>---▷♡>>---▷♡
Una simple chica, trabajando en un lugar "ordinario", ¿Esta era la gran vida que soñaba?, ¿Donde quedaron aquellas fantasías de la infancia?, Para esas preguntas la respuesta era obvia, no llegara un príncipe azul para llevarte a su castillo, pero, si llegara lo que llaman "Sugar Daddy".
El inicio de todo fue ese magnifico día, donde Nanami coloco su traje de maid para ir a la cafetería, una mala idea, el acoso en las calles y las miradas lujuriosas no se hicieron esperar, pero esa es la consecuencia de trabajar en un lugar para frikis.
Aunque un inesperado giro de la vida la llevo a los brazos de Taiju, un hombre mucho mas alto que ella, todo por un absurdo choque.
-Discúlpeme señor no lo vi venir-
-¿Y tu de que circo saliste?- Dijo mirándola de pies a cabeza por su vestimenta tan poco común.
-Yo solo voy a mi trabajo señor- Contesto algo nerviosa por lo mucho que la intimidaba ese hombre, con solo ver sus músculos Nanami se imaginaba una serie de cosas tan masoquistas.
-Una tipa que regala su cuerpo con ese atuendo es muy poco ético-
-¿Disculpe?- Exclamo molesta.
-Yo ya me disculpe con usted y con su permiso me voy a la CAFETERÍA donde trabajo- Avanzo dejando aquel hombre atrás, sin saber que este la seguiría a su empleo.
El día marchaba normal, atender, servir, ordenar etc. Los ojos de Nanami se abrieron cuando un cliente azoto su trasero llamando la atención de todos los clientes.
Estaba por voltear y sentenciar al chico, cuando para su sorpresa el hombre de la mañana estaba ahí, jalando al cliente que se atrevió a tocarte.
El se aseguro que el hombre saliera de la tienda y te dejara en paz, gesto que iba a agradecer, pero al salir ni el tipo estaba ahí.
Tu hora de partida llego, al parecer Taiju se quedo esperando en su carro. Lo viste bajar y acercarse a ti lentamente.
-De nada niña- Dijo con ironía
-Le iba agradecer antes señor pero usted se retiro- la chica podía seguir hablando pero esa voz tan varonil la callo.
-Taiju, ahora súbete Nanami-
-¿Como sabe mi nombre?- Preguntaste confundida a lo que el señalo el gafete que tenias pegado en la parte de tus pechos.
Fue algo incomodo, pero, por dentro tu deseo hacia Taiju crecía, así pasaron los meses, iba por ti, te dejaba, incluso se quedaba a dormir en tu casa, el se dio cuenta que no eras una ofrecida como pensaba y lo mas importante , aun eras virgen, era lo que mas cuidaba de ti, tenia esa maldita de idea de que tenia que estar con una mujer así.
Solo que odiaba verte irte todos los días con ese estúpido traje, el no tenia porque compartirte, ni siquiera tendrían que mirarte, cualquiera que lo hiciera ganaba un boleto para el mismísimo infierno.
Harto de ver como todos los chicos te deseaban, una noche decidió contarte todo.
-Súbete rápido, necesito contarte algo- Dijo serio sin haberte saludado.
-¿Ahora que grandulon?, ¿Por que esa cara larga?-
Solo te ignoro, se subió al automóvil y antes de que dijeras algo hablo el.
-Quiero que dejes esta mierda de trabajo, ¿Quieres dinero?, yo te lo puedo dar, solo no quiero que estos idiotas sigan viendo lo que es mio-
-¿De que carajos hablas Shiba?, no puedo dejar de trabajar, el dinero es todo lo que quiero- Durante sus meses de convivencia dejaste en claro porque trabajabas en ese lugar lleno de extraños fetichistas, por el dinero, sobrepasaba los 20,000 yens.
ESTÁS LEYENDO
ღ𝐎𝐍𝐄-𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒ღ
FanfictionCapítulos diversos y eroticos con tus personajes favoritos de Tokyo Revengers. ¡Tendrás todo tipo de escenarios con estos chicos, disfrutalo! ;)