Capítulo 12: Banquete (2)

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Traducción: Almira
Edición: Eila

Con una clara sonrisa, el contenido de lo que acaba de decir fue lo suficientemente impactante como para ser escuchado solo por el Maestro de la Torre Azul.

"Aigoo, ¿qué quieres decir con 'el salón de banquetes será atacado'?"

Lisefield, el Maestro de la Torre Azul, preguntó con una mirada sorprendida.

"Tu voz, hazla un poco más bajo".

"Lo siento."

Pensó que lo dijo en voz baja, pero fue un poco fuerte. Lisefield asintió con una cara incómoda mientras Raymond le advertía a la ligera.

"¿No deberíamos notificar a la Guardia Imperial?"

"Puede que sea de la familia imperial, pero todavía era un sinvergüenza hasta hace poco. ¿Crees que los Guardias Imperiales o los Caballeros Imperiales me creerán?

Raymond le preguntó al Maestro de la Torre Azul hasta el punto en que se quedó sin palabras.

A pesar de que ha cambiado ahora, todavía era increíble viniendo del sinvergüenza quinto príncipe.

En esta escena del banquete, hubo un ataque a la Familia Imperial, pero el Imperio sigue vivo.

Sería demasiado cancelarlo de repente, creyendo solo las palabras del quinto príncipe, que una vez fue un sinvergüenza.

"No lo creerías, ¿verdad, viejo?"

Habló con una voz tan baja que solo el Maestro de la torre podía escucharlo. Por supuesto, su título también ha cambiado.

"¿Así que tenemos unas tres horas para irnos?"

"Eso es todo, ¿verdad? No sé la hora exacta en realidad".

Habló con franqueza.

|Pasada la medianoche, las sombras negras vivientes se lanzaron al salón del banquete.|

Era parte de la historia descrita en la novela. No se escribió la hora exacta de la redada, pero se puede estimar que ocurrirá después de la medianoche.

"¿Por qué no me lo dijiste antes?"

"Ni siquiera lo creerías si te lo dijera antes".

"Todavía es difícil de creer, incluso ahora".

Sacudió la cabeza con un breve suspiro ante las palabras de Lisefield.

"Lo sabrás cuando llegue el momento".

Cuando Raymond terminó de hablar, llamó a Gesteine.

Gesteine, que había desconfiado de los alrededores, corrió hacia él de inmediato.

"¿Me llamó, Su Alteza?"

"El salón de banquetes pronto puede ser atacado".

"Estaré preparado".

Gesteine, que tiene un carácter de caballero leal, siguió las instrucciones sin decir una palabra, a diferencia de Lisefield.

Para él, Raymond, el quinto príncipe, fue el salvador que le devolvió sus habilidades perdidas con la espada que todos decían que eran imposibles de recuperar.

Aunque no ha llegado a la etapa de la fe ciega, se ha sepultado una profunda confianza en los ojos de Gesteine, quien ve solo al quinto príncipe como su maestro.

"¿Nos quedan unas dos horas...?"

El banquete fue aburrido.

Muchos nobles se acercaron, pero todos solo se miraron entre sí, y nadie se atrevió a hablarle primero.

El extra más grande de la historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora