Mientras espero el bus para ir a casa de Alice busco mis audífonos para escuchar música, no estoy segura de qué quiero escuchar así que coloco mi playlist de me gusta en aleatorio. Comienza a sonar 11 razones de Aitana, la dejo porque me encanta esa canción, amo la voz de Aitana, el sentimiento con el que canta y lo que me transmite, es realmente increíble.
Me siento en una banqueta a esperar, como es sábado muy pocos buses trabajan, pienso en esperar un poco más, si no, caminaré, la casa de Alice tampoco queda tan lejos y la verdad, me siento extraña cuando voy sola en bus, estoy acostumbrada a salir siempre acompañada, bien sea por mi abuela, padres, hermanos o con Alice. Rara vez salgo sola.
Pasan 20 minutos y no pasa ningún bus así que decido caminar. Mientras lo hago, veo a niños felices, personas disfrutando del día, y solo pienso una cosa. Cuán ajenos somos a la realidad del otro. Solo sacamos conclusiones sin saber qué es lo que de verdad está pasando en la vida de las personas.
Decido quitar la música y guardar los audífonos cuando ya me falta poco por llegar a casa de Alice, la llamo para decirle que estoy cerca para que esté pendiente y me abra la puerta. Vive en un edificio privado y para poder entrar hay que tener un control que abre la puerta y el portón.
Al cruzar la esquina ya Alice está abajo esperándome.
Abre la puerta y me da un abrazo.
-Hola mi amor.
Alice y yo siempre nos hemos tratado lindo, en realidad es una relación amor-odio en realidad, podemos tratarnos mal, pero siempre es con cariño.
-Hola mi vida.
Le respondo y entramos al edificio. Mientras subimos las escaleras, Alice me va contando lo que ha sucedido estos días allí. Muchos chismes en realidad, nada nuevo para ser sincera.
-¿Cuéntame Stella, al final si te vas el lunes?
-Al parecer si Alice, estamos esperando que la agencia nos confirme.
-Entiendo, te voy a extrañar demasiado, lo sabes, ¿no?
-Se que si Alice, yo también te extrañaré muchísimo. Pero ya no hablemos sobre eso, mejor preparemos algo para comer.
-Mejor, tengo mucha hambre.
Comenzamos a cocinar mientras escuchamos música y nos reímos, hablamos de todo y de nada a la vez, así es todo cuando estamos juntas, divertido y lindo.
Estamos preparando spaghetti con carne molida, otra de mis comidas favoritas. Mientras escuchamos de fondo ''llamado de emergencia'' del papu Daddy Yankee, así solemos decirle. Cantamos, bailamos y disfrutamos la canción al máximo. Al terminar la canción Alice me dice que la comida está lista, entre las dos colocamos los platos en la mesa y nos sentamos a almorzar, si, a almorzar a las 3 de la tarde. En Venezuela se suele almorzar a las 12 del mediodía, así que estamos un poquito pasadas de la hora.
-La comida quedó deliciosa- Dice Alice mientras Agarra el vaso para tomar Coca-Cola.
-Corrección, me quedó deliciosa- Digo mientras le guiño el ojo.
Ambas reímos. Cuando terminamos de recoger y lavar los platos, entra mi tía Lisa a la cocina, como siempre me saluda con un beso en la mejilla.
-Bendición tía.
-Dios te cuide mami, ¿Cómo estás?
-Bien tía, full por lo que acabamos de comer, ¿Usted cómo está?
-Me imagino, Yo estoy bien, un poco cansada por el trabajo, pero ya sabes cómo es todo, sin trabajo no hay para comprar comida.
-Eso es cierto tía.
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¿Y si vamos a la luna?
Teen FictionEsta es una historia de amor y superación personal, con situaciones que viven algunos adolescentes. Para esas personas que se sienten incomprendidas, solas y minimizados, para esas personas que están aprendiendo o que ya aprendieron a quererse. Aque...