¿Y si vamos a la luna?

Prólogo

                                                                               ¿Y si vamos a la luna?

Cuando no estoy en mi mejor momento sentarme a ver un atardecer, las estrellas, la luna o simplemente ver el cielo, me da una paz y una tranquilidad tan inexplicable que siempre me surge esa pregunta, "¿Y si vamos a la luna?" Sé que es algo tonto, quizás porque es prácticamente imposible. Pero a pesar de no poder ir a la luna, siempre hay personas que te hacen sentir como si estuvieras en ella, te transmiten paz y tranquilidad, hacen que te sientas cómoda, como si estuvieses en tu verdadero hogar. Muchas veces nos sentimos incomprendidos, juzgados o incluso minimizados frente a otras personas. A veces, nos enfocamos solo en cosas que ocurrieron en el pasado y vivimos con miedo de que la historia se repita. Solemos culparnos por cosas que suceden, aunque no siempre tengamos culpa alguna, solo lo hacemos porque de alguna forma nos acostumbramos a ser responsables por las acciones de otros cada vez que estás tienen alguna repercusión emocional en nuestra persona.

A veces la "familia" influye en ello, en la forma que nos sentimos, ya que suelen sacarnos en cara esas cosas que no hicimos de la mejor manera, tienden a compararnos con personas que son "perfectas" cuando la realidad es otra ya que ningún ser humano lo es.

Soy Stella y quiero recordarles que cada historia es distinta, pero todas valen la pena. Todas las historias merecen ser escuchadas porque al igual que la persona que la cuenta, son importantes. Sin importar cual sea, siempre será digna de ser contada y esta, es mi historia.