El arrepentimiento muchas veces es la peor prisión, algunos de los peores criminales que no se arrepienten de nada ni siquiera sienten que están en una cárcel. Pero los otros, los que si llevan la carga de todos sus crímenes son los que sufren más aún por solo unos años entre barrotes.
Puede que yo no esté en la cárcel, pero el arrepentimiento me consume. Te odio por eso, y lo sabes.
Sabes que te odio, te odio más que a todo, pero eso ya lo sabes. Lo sabes y porque lo sabes te alejas, lo sabes y debido a eso me abandonas.
El arrepentimiento me impulsa a odiarte pero realmente no lo sé. Tú lo sabes y yo no, y por eso decido odiarte, ya que tú sabes cosas que yo no, sabes todo lo que a mí me gustaria saber, ya que si no lo supieras ¿Te abrías alejado?
Quizás si, quizás no, no lo sé. Es algo que no puedo saber, pero tal vez tú si, tú siempre lo sabes, siempre lo has sabido.
Yo siempre he creído que lo sabía todo, que nadie podía saber más que yo, fui criada para eso, fui criada para pensar eso. Pero te encontré un día, te encontré debajo de aquel árbol y me mostraste más de lo que pude haber aprendido en un libro.
Extraño eso.
Extraño esos momentos en dónde tú y yo nos pasábamos días enteros aprendiendo cosas nuevas. Me enseñabas cosas y yo a ti, te enseñe a ser una dama digna de un trono, y tú me enseñaste a vivir.
Extraño estar ahí, contigo, viviendo nuestros días sin preocuparnos por el mañana, viendo el cielo, compartiendo sueños y dándonos besos hasta cansarnos.
Extraño todo eso y mucho más, tanto que en estas páginas no habría espacio para contarlas.
Todo lo que representas es lo que extraño, todo lo que haces es lo que extraño. Extraño tu risa, extraño tus ojos, extraño tu piel, tu cabello, todo tú lo extraño.
Pero por querer agradar a alguien que no lo vale hizo que nuestra pelea acabará mortalmente con todo lo nuestro. Te dije que te odiaba, pero no se por qué, tal vez tú lo sabías y volvemos a lo mismo.
Ahora te escribo estás palabras, tantas que no se si alcanzaré a expresarlo todo. Tal vez te dedique mil cartas, tal vez te escriba mil libros, pero quiero expresarte todo lo que siento.
Ya no podré hacerlo, estoy atrapada entre el arrepentimiento, un arrepentimiento mío y también mucho que no lo es.
Estoy atrapada entre mundos infinitos llenos de dolor y sufrimiento. Mundos en dónde somos enemigas, mundos en dónde ni siquiera nos encontramos sino hasta un momento muy tardío, mundos en dónde nuestra historia acaba y mundos en dónde apenas comienza. Mundos infinitos de infinita tristeza, pero tanto como los hay también los hay de dicha. Esos son mis favoritos.
Los observó una y otra vez, viendo su historia de principio a fin. No sé cuánto ha pasado, tal vez días, meses o años. Tras la pelea te abandone y escribo todo esto con la esperanza de que llegue a ti y sepas que estoy bien, que no te abandone, que no deje de amarte. Tal como aquel mundo en dónde te escribí hermosas palabras para recuperarte. Pero tal vez sea como aquel mundo en dónde paso lo contrario y te aleje más de lo ya estabas con una carta escrita sin cuidado, guiada por la corbardia. No quiero que nada de eso pase, por lo que estoy dispuesta a escribirte libros enteros para dejarte en claro lo que siento por ti.
Te amo, mi amor, esa es la verdad. La máxima verdad, la más pura que sin importar cuál sea el mundo, siempre se cumplirá. Te amo, yo te amo y cada mundo infinito que llegue a ver es así. Sin importar como sea, yo siempre te amaré, aquí y en cualquier mundo, te amaré. Puede que no lo descubra al instante como yo en nuestro mundo, pero tarde o temprano lo haré en todos los mundos. Tal vez muy temprano, tal vez demasiado tarde, pero siempre lo haré y te seré leal.
Tal vez las palabras que te escribo suenen a locura, pero es más que la verdad. Ya te digo yo, mi amor, tu amor siempre es sincero y mi amor por ti es puro, por más que no lo entienda al principio, por más que me haga hacer locuras. Con esto te pido perdón, te pido perdón por todos los mundos en dónde te hice daño, por todos los mundos en los que no comprendí lo suficiente lo que sentía. Como aquel mundo en dónde me desquite contigo por mis propias acciones, o aquel en dónde no comprendía mis sentimientos ni mis acciones y acabe haciéndote algo horrible, tanto que ni siquiera comprendo mis propias acciones. En aquel balcón a la luz de la luna, dónde en cientos o miles de otros mundos se daba la más profunda promesa de amor, se había vuelto tan oscuro como un día gris tras empujarte por aquel valle de dolor y tristeza.
Perdón, mi amor, mi arrepentimiento me consume.
Ver tantos mundos, cada uno tan distinto, me lleva a reconocer nuestra verdadera historia. No importa como, nos conocemos, sea tarde o temprano, sea en nuestra infancia, ya siendo adultas o incluso en nuestros últimos días. Nos enamoramos con una profundidad tan intensa que ninguna de las dos se puede librar. Tu amor es sincero, y lo captas enseguida, aunque a veces no y es todo un problema. Mi amor es puro, pero no lo entiendo, aunque a veces si y también es un problema. Nuestro mundo, mi amor, aquel tan lejano que ahora solo noto como una estrella en el firmamento infinito, es aquel en dónde nuestra historia nunca tuvo fin debido a mi estupidez. Alejarte, desearte mal, solo hubiera querido que nuestra historia hubiera sido como la de aquel mundo en dónde a penas conocernos nuestros labios se encuentran en una promesa irrompible. Quizá hubiera sido hermoso, quizá hubiera sido confuso, pero al final nuestra historia es la que vivimos tú y yo, la que repito una y otra vez en mi memoria.
Y ahora estoy aquí, nuevamente frente a ti, pero sin que seas tú. Viajando, riendo, jugando... Tan feliz, tan hermosa, tan tú. Mundos imposibles, mundos infinitos, pero nuevamente aquí contigo otra vez, viéndote otra vez a través de un cristal que me gustaría atravesar cada vez, pero me lleva una corriente invisible entre mundos, una corriente de la que no lucho, quizá por qué no tengo fuerzas, quizá por qué sea inútil, realmente no lo sé.
Pero aquí, frente a un mundo brillando en agonía, un mundo gris que no alcanzo a reconocer completamente, un mundo en el que estas y no estás a la vez. Noto tu presencia, pero no estás tú. Solo hay personas extrañas, caras tristes y extraños artefactos que parecen de fantasía. Pero a pesar de no verte, a pesar de no encontrarte, se que estás ahí en algún lado. Y la corriente me lleva, cada vez más rápido, hacia aquel brillo cegador sobre esa ciudad ahogada en agonía con esperanza de encontrarte y verte otra vez.
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Amor Obsesivo [Akame ga kill/Citrus]{Akame x Yuzu)
Fiksi PenggemarYuzu acabara, después de un accidente, en el mundo AGK 5-2-4 [Akame Ga Kill] y aquí iniciara una nueva vida con nuevos amigos, nuevos retos e incluso nuevos amoríos... ... Ojala todo fuera color de rosa... Un sentimiento obsesivo hará que ella mate...