Yoon es un pequeño híbrido de gato blanco que ha salido de un infierno en la prostitución, cayó en las manos de Park Jimin gracias a una apuesta y ahora vive en otro infierno, uno diferente, uno que no puede evitar pero que extrañamente le gusta...
Al día siguiente Yoon despertó en el baño, se arrepintió de hacerlo ya que soñaba con las mantas calentitas y los brazos de su amo abrazándolo, pero como siempre solo fue un sueño.
Hoy en particular se sentía un poco más cansado, no sabía muy bien el por qué pero seguro se le pasaría después, se levantó y salió del baño, miró a Jimin en la cama durmiendo y quiso saltar sobre él para dormir un rato más. Sabía perfectamente que su amo no se molestaría si estaba en su lado gatuno pero no quería arriesgarse, no tenia derecho.
Espero con paciencia en la alfombra pero hoy no tenía ganas ni siquiera de comer y pagar por la comida, estaba desanimado.
Se sentía traicionado o decepcionado por la manera en que su amo lo trató ayer después de decirle que dormiría con él, de solo recordarlo bajo sus orejitas, triste.
Después de una media hora después, Jimin despertó y de inmediato sonrió al ver a su gatito en la alfombra esperando por él.
-buenos días, ¿tienes hambre?- se sentó en la cama y tomo en brazos al gatito -lo que hiciste ayer estuvo bien así que estas a salvo pero solo hoy.
Yoon ronroneo levemente sin hacer nada más, Jimin lo acaricio en su regazo.
-vamos a desayunar, espera en la cocina- lo bajo y fue a darse una ducha rápida con agua fresca para comenzar el día y después ver si quiere ir a trabajar o si va a depender de su padre SeokJin una semana más.
Yoongi por su parte corrió a la cocina, su actitud ya había cambiado a una más alegre y positiva, tenía cambios de humor cosa que se le hizo raro pero con que no hiciera nada malo todo estaría bien para él, sin castigos.
Jimin bajo y comenzó a cocinar primero su desayuno (como siempre) y después le serviría a él, así que maullo un poco y le ronroneo gustoso esperando por su comida.
-aún si el mundo se divide en dos, aún si el mundo se termina hoy, te pido no me sueltes por favor, te pido nunca quieras despertar...- cantaba Jimin mientras cocinaba concentrado -pero escucho el mar desde donde estoy, solo un bosque más falta por cruzar, si es como soñé abra claridad...
Un rato después sirvió su comida y tomo la bolsa de croquetas de gato, las puso en un plato sin mucho cuidado haciendo que cayeran fuera.
-come- dijo simple y tomo su móvil para mirar mientras comía su desayuno.
Yoon comenzó a comer sin poner mucha atención a su amo y a sus malestares.
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Cuando la hora del desayuno paso, Yoongi junto a Jimin se encontraban jugando en la sala, claro Yoon en su lado animal para darle gusto a Jimin.
-pequeño juguetón- sonrió mientras miraba como su pequeño luchaba por tomar entre sus pequeñas y peludas manitas la mano de Jimin. En una vuelta Yoon cayó del sofá haciendo reír a su amo.
Yoon disfrutaba ver feliz a su amo a pesar de que en algunas ocasiones se lastimaba, corrió de nuevo al sofá pero un fuerte calor y un punsante dolor lo atacó sin piedad haciéndolo jadear y transformarse a su lado humano.
-¿que te pasa?, en ningún momento te di autorización para cambiar forma- reprendió con molestia pero Yoon solo se retorcio en su lugar.
-a-am~ es-es mi celo~- maullo con dolor.
-a tu maldito celo llego, no tengo ganas Yoonie~ sabes que no lo hago si no quiero pero...
una idea loca pero buena a su parecer pasó por su mente.
-yo no quiero pero tengo algunos amigos que estarían encantados de conocerte y ayudarte.
-n-no amo~ yo soy s-suyo solamente
-te gustará... pero te dolerá un maldito infierno, te lo aseguro....
