capitulo 15

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Lo miro estupefacto al tratarse de zafar de su agarre de Dominic, cuando le menciono aquellas palabras. Su mirada y expresión estaban  recelosas y angustiadas. Al querer salir de su alcance dio un paso atrás chocando con la pared, se sintió como un ratón acorralado ante una boa con una sonrisa maquiavélica.

Quería salir, se sentía el peligro y la adrenalina en su sangre, sus piernas reaccionaron antes que sus pensamientos y salió rápidamente por un costado esquivando a la gente como podía, recibió barias derramas de la gente su cuerpo desprendía el olor a alcohol mesclado con el sudor. Escapar era lo mejor, pero por un momento recordó a Kendrick y decidió buscarlo para pedirle ayuda.

Trato de buscarlo pero con el miedo y adrenalina palpitante ella simplemente distinguía peor a la gente, a las luces, a las pláticas. Tenía que calmarse, y se obligó a hacerlo, respiro profundo y trato de llenarse con la mejor calma posible y fue así cuando consiguió calma y trato de profundizar en una esquina del bar improvisado, cerró los ojos y dio una aspiración fuerte tratando de encontrar su aroma o la de algún nephilin, lo logro después de una concentración absoluta, estaban en lado opuesto, se olvidó por un momento de Dominic y quien quiera que este con él.

Fue más rápida de lo normal y llego hasta donde había percatado el olor y la presencia de ellos, pero ellos ya no estaban en aquel lugar. Otra presencia oscura si estaba con ella, volteo para ver a unos tipos pálidos, al parecer mellizos, trago en seco al ver aquella chica con el pelo corto y cortado de una forma irregular, el chico con un cabello de un corte recto pero a su parecer abundante, con su sonrisa de costado. Lo sabía... estaba atrapada.

La tomaron por los brazos y luego de forrajear perdió la conciencia.

***

Los males nunca vienen solos, cuando piensas que ya pasaste lo peor, siempre habra algo peor.

La felicidad solo te puede durar unos microsegundos antes de arrastrarte a la completa agonía de la oscuridad.

Cloe despertó totalmente desorientada, toda su vista estaba nublada de un perpetuo negro, no sabía si estaba con los ojos cerrados o abiertos, al querer mover sus manos solo se encontró con un ardor que aumentaba mientras más intentaba su liberación, era como si esas sogas estuvieran hechas de fuego. Al rato que se dio por vencida escucho unos movimientos, sin ver nada se movió desesperada por el lugar, cualquiera que fuera no se iba a dejar atrapar o sucumbir fácilmente. Escucho toser a una persona y al parecer a .la segunda removerse, pero había alguien más que empezó a hablar.

―¿Qué demonios es este lugar? ―dijo con una voz adolorida. Cloe recordaba aquella voz vagamente.

La persona de su derecha gruño en frustración. Entonces comprendió que no era la única atrapa en el lugar, había tres personas a su alrededor, ella percibió su suave esencia a nephilim.

El de su derecha se arrastraba en son de encontrar algún lugar o escapatoria.

―Oye... tu ―Cloe trataba de encontrar la postura más cómoda ignorando los que estaban a su alrededor―. Hey chica... ―miro de frente algo pedante, aunque no le pudieran ver los ojos percataban su esencia.

―¿Qué quieres? ―dijo con una voz de cierta forma ronca.

―Cloe, ¿eres tú? ―le dijo el muchacho del lado izquierdo que antes lo había escuchado toser.

―Kendrick... ―se movió hacia el tratando de quitarse la capucha que tenía y se removió solo consiguiendo dolor. Mayormente desde su vuelta al mundo se sintió como Ariel, la sirenita, al hacer su intercambio, a cada paso que daba solo sentía dolor.

Angel CaidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora