El rugido de un trueno, seguido por un estallido de luz que iluminó la habitación, despertó a Byul. Se sentó en la cama, asustada. Miró a la ventana y vio el resplandor de los relámpagos a través de las cortinas. De repente notó unos brazos suaves, que la atraían de vuelta a la calidez y la seguridad de su abrazo, y se volvió para refugiarse en ellos.
Byul apoyó la cabeza en la almohada justo cuando otro relámpago iluminaba el rostro de Yong sobre el suyo.
-Estoy aquí contigo, Byul. Estoy aquí contigo.
La voz de Yong era suave y melodiosa. Byul notó que le abría el albornoz y lo quitaba de en medio. La piel le ardía. Unos labios cálidos le acariciaron el cuello; Yong se le puso encima y Byul abrió la boca para recibir su lengua.
-Mami...mami... -oyó en la distancia.
Byul se removió en la cama y sonrió, acunada en un cálido abrazo que la llenaba de bienestar. .
-Mami...
Byul abrió los ojos perezosamente al oír que giraban el pomo de la puerta.
-Ya voy, cielo -respondió, aún medio dormida.
Se permitió respirar una vez más en la calidez que la envolvía.
-Creo que Jun tiene hambre -le dijo una voz suave en el oído, antes de darle un beso.
Byul abrió los ojos de golpe y se apartó de los brazos que la rodeaban casi de un salto, antes de quedarse mirando a Yong fijamente en estado de shock.
-Buenos días -susurró Yong .
Byul parecía a punto de decir algo, pero en ese momento Jun volvió a girar el pomo.
-Mami?
Byul se puso muy nerviosa. Sus ojos saltaron de Yong a la puerta y de vuelta a Yong .
-Ve con tu hijo, yo te espero aquí -le dijo Yong , en un tono suave pero firme.
Byul parecía haber perdido el habla. Sacudió la cabeza, como si quisiera despertar de un sueño. Fue a levantarse y entonces se dio cuenta de que estaba des- nuda y lo
recordó todo. Desesperada, empezó a buscar el albornoz que le constaba que había llevado puesto la noche anterior.
-Ten, Byul. Póntelo.
Byul se volvió hacia Yong , que le tendía el albornoz.-Date prisa -le sonrió Yong .
Byul se dirigió apresuradamente hacia la puerta. Una vez frente a ella, se detuvo y tomó aire antes de salir a buscar a Jun .
Yong se quedó en la cama a esperarla. «Otra mañana después», se dijo. Sólo que esta vez era ella la que se quedaba en la cama. Oía la voz de Byul en la sala. Le hablaba a Jun en un tono dulce y cariñoso, y su afecto la cautivó. Por la manera en que le hablaba a su hijo, era evidente que Byul lo adoraba.
A pesar de que la conocía desde hacía dos años, se daba cuenta de que no sabía nada de ella. Al menos nada Importante. Conocía todos los hechos y detalles de su vida, pero no conocía a la verdadera Byul. De repente, la invadió el deseo de conocer a la mujer cuyo cuerpo había poseído horas antes. Y, al pensar en ello, Yong no pudo evitar recordar.
Byul se había mostrado apasionada y receptiva, (otno si la deseara tanto como Yong a ella. Yong cerró los ojos y las imágenes empezaron a recorrerla como un torrente: Byul con la cabeza hacia atrás, suplicándole que no parara; Byul inspirando la primera vez que la penetró. El deseo volvió a hacer presa en ella.
ESTÁS LEYENDO
POR AMOR (adaptacion Moonsun)
Fiksi PenggemarBienvenidas a un mundo donde el petróleo es amo y señor, la pasión se impone a la razón, y las gentes viven bajo la constante amenaza de guerra civil. Un mundo donde Kim Yong sun se mueve como pez en el agua. Al contrario que Moon Byul , cuyo marido...