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Dayeon se dirigió a la habitación de Youngeun, y abrió la puerta sin siquiera preguntar.

Mientras caminaba, se iba preguntado el porqué no había visto a la pelinegra en todo el día. Lo último que supo fue que ayer iba a hablar con Bahiyyih de algo importante.

Sin embargo, no esperó verla acostada en su cama, con su cabeza apoyada en la almohada. Llorando desconsoladamente.

¿Qué demonios había pasado?

Dayeon olvidó su propio dolor y cerró la puerta con seguro para luego acercarse rápidamente hacia su dongsaeng.

– Pequeña ¿qué tienes? – Youngeun la miró, y no dudó en abrazarla.

– Unnie... Bahiyyih... y Hikaru... – Youngeun balbuceaba cosas, aún así, Dayeon supo entenderla muy bien.

Mierda, había descubierto la relación entre Hikaru y Bahiyyih.

Después de unos minutos abrazadas, y llorando – sí, ambas, porque ambas estaban heridas de distintas maneras – al fin pudieron calmarse un poco.

Youngeun fue la primera en hablar.

– Ayer Bahiyyih me dijo que tenía que contarme algo muy importante. Como la vi muy emocionada, pensé que estaba relacionado con la agencia. Sin embargo... lo que me dijo fue algo que definitivamente no lo esperaba.

– ¿Qué pasó?

– ¿Tú sabías que Bahiyyih y Hikaru estaban saliendo desde Girls Planet? Tienen una relación incluso desde antes que Hikaru comenzara a gustarme – Dayeon abrió la boca sorprendida. Si bien sabía con exactitud de la relación de las dos, no estaba segura del tiempo en que esto había pasado. No sabía que había sido tanto.

Youngeun la observaba atenta, y Dayeon sabía que no podía mentirle.

– Lo siento – fue lo único que dijo. Youngeun lo entendió.

– ¿Por qué? ¿Por qué no me lo dijiste? Me he visto como una imbécil en frente tuyo, hablándote de lo mucho que me gusta Hikaru, y aún así, no me detuviste. No me advertiste que podía terminar con el corazón roto. ¿Por qué, Dayeon Unnie? Creí que eramos amigas.

– Me enteré hace un par de días, justo cuando Chaehyun comenzó con su loca obsesión. Y yo... no quería que salieras lastimada. Perdóname. Juro que no lo hice con mala intención – Youngeun la observó con el ceño fruncido por unos segundos, pero luego se calmó. Creyó en ella.

Y Dayeon se sintió aliviada.

De repente entendió todo.

Entendió el porqué esta mañana Bahiyyih y Hikaru no se habían sentado juntas, ni tampoco habían cruzado tantas palabras. Al principio pensó que era alguna discusión de pareja. Ahora entendía que fue para no lastimar más a Eun.

Ellas no querían herirla, por lo que decidieron tener el menor contacto posible aún siendo novias. Dios, sus amigas se merecían el cielo.

– Le conté a Bahiyyih de mis sentimientos por Hikaru, y supo tomarlo bien. Sin embargo, también me dejó en claro con palabras suaves, quién es la que debe retirarse. Y lo acepté. Porque ella es una persona que merece todo el amor del mundo por ser la mejor amiga que puede haber en este planeta. Y Hikaru merece amar y se amada con gran intensidad, así no sea con conmigo. Estoy molesta. Estoy herida. Pero nada de eso va a impedir que las apoye. Las amo a ambas, de distintas maneras, pero es amor al fin y al cabo...  no voy a ser egoísta. Aunque duela... porque duele como el infierno.

– Ven aquí... – Dayeon volvió a abrazarla fuertemente, intentando transmitirle todo el cariño y el consuelo posible. Intentando decirle con acciones que no se encontraba sola. Jamás lo estaría.

Porque a pesar de que consideraba a Xiaoting y a Chaehyun como sus mejores amigas – aun si se encontraba enamorada de esta última – también le tenía un gran, pero gran afecto a la pelinegra menor , quien desde un inicio supo tratarla bien.

–P-Por cierto... ¿necesitabas algo?, ¿por qué viniste? – oh, era verdad.

¿Cómo decirle que había cometido una tontería?

–Yo... discutí con Chaehyun, y... le dije que iba a pedirte que seas mi novia.

–¡¿Que tú qué?!

–¿E-Estuvo mal?

–¡¡Dayeon!!


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¿Dayoungz? || ChaedaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora