{7} No puedo hacerlo, mi príncipe de estrellas

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Al día siguiente Beatrice ya se encontraba en "El Sudio" cuando Taran llegó. Pero había algo diferente en ella. Estaba llorando descontrolada.

Taran, preocupado, corrió hasta ella y le preguntó lo que había ocurrido. Sin embargo, la respuesta que su princesa de fuego le dio no era la que pensaba.

—Mi padre me va a casar con Lord Percival. Dice que ya es momento de casarme, que no puedo esperar más. He intentado retener cada candidato por mi mano que me ha presentado. —Miró a Taran, con sus ojos reflejando su roto interior—. Ya no puedo hacer nada. No me ha dejado otra alternativa.

—Entonces escápate conmigo esta noche. Seremos libres, no tendrás que preocuparte por tu...

—No puedo hacerlo, mi príncipe de estrellas. —El corazón de Bea se rompía con cada palabra que salía de su boca—. De esta manera podré evitar que mi padre desate una guerra. Porque eso es lo que quiere. Quiere todo Velkela para él mismo. Si desaparezco, y tu también, pensará que me has secuestrado, que todo fue plan por parte de tu padre para derrocarlo. Sería el final, Taran.

—No pueden hacernos esto. No pueden separarnos. Las estrellas y el fuego son eternos.

—Las estrellas mueren y el fuego se apaga, Taran. —Le dio un último beso. Las lágrimas corrían por las mejillas de ambos, sin ser capaces de cesar—. En otra vida podremos estar juntos, en otra vida podremos amarnos sin cadenas. En otra vida el fuego y las estrellas son eternas.

Así, la princesa de fuego, se fue. El príncipe de estrellas estuvo ahí toda la noche, simplemente llorando y pensando en su amada; en aquella princesa que no podía tener.

La palabra de que la princesa del Reino del Sur se casaría llegó a todos los rincones de cada reino. El príncipe Taran tuvo que sostener su corazón durante la boda de su princesa de fuego. Simplemente se quedó allí, ignorando ese sentimiento que lo mataba lentamente. Nadie objetó, y eso solo rompió más a los jóvenes amantes. Beatrice se casó con Lord Percival, y Taran se unió al ejército de su padre.

Una historia de Fuego y EstrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora