Mi amado rey Sesshomaru

Capitulo 12 La cruel realidad

Kaede se acerca a Aome para tratar de detectar si había algún sello que no permitiera usar sus poderes espirituales.

-Ya no tienes poder espiritual, te ha sido filtrado.- hablo Kaede con angustia.

-Es cierto anciana, el poder espiritual de Amor ahora es mío, y muy pronto el de la sacerdotisa de barro.- dijo en tono suave.

Yako le indica a Inuyasha que le quite las vendas a Kikyo para drenar su poder, Aome se dió vuelta y vio los cuerpos de Sango y Miroku en el suelo con sangre .

-Yako que has echo?! Acaso... Mataste a los amigos?!- le gritó con enojo en su tono.

-Creo recordar que te dije no mataria a nadie, y eso hice, ellos están bien solo están inconveniente.- dijo desinteresado.

Por petición de Aome, Yako les perdono la vida a Kaede y a sus amigos, dando la orden que era tiempo de regresar a su castillo para afinar los detalles de la siguiente conquista, pero antes tenía que encargarse de Kikyo.

-Inuyasha, rompe la vasija de Kikyo y traeme su poder, es una orden. - dijo Yako en tono suave.

-Si maestro, enseguida.- haciendo una reverencia.

Kai llego delante de Yako para mostrarle 4 fragmentos que había recolectado, Yako se quedo con 3 y le dio 1 a Inuyasha, pero en la mirada de este habia desesperacion por aquel fragmento. 

-Tanto lo deseas?, bueno, aqui lo tienes mi pequeño hermano... - dijo con voz ronca.

-Si maestro, por favor tenga consideración por mi.- dijo suplicando.

-Esta bien te lo daré, quiero que seas alguien poderoso.- explico con voz firme.

Yako le incrustó el fragmento, haciendo que Inuyasha cambiara un poco, la pupila regreso a tomar ese dorado tan característico de la familia Taisho.

-Muchas gracias maestro Yako. Usted ordena mi amo.- dijo Inuyasha de rodillas.

-Regresa al palacio del Norte, busca mas sacerdotizas, su poder nos ayudara.- ordeno con autoridad.

Inuyasha salió del despacho para dirigirse al Norte, entonces Aome entro al despacho para ver a Yako con los planos de los cuatro puntos cardinales, se acercó lentamente, era evidente que aquella mujer de temperamento fuerte había sido domada por aquel demonio perro.

-Pasa algo amor mío?- pregunto con voz suave.

-Te has convertido en un monstruo, ya no te reconozco.- dijo con los ojos llorosos.

-Lo que ves, es lo que siempre e Sido, ahora que estás libre del hechizo, debo hacerlo de nuevo, ya que me traeras problemas si no te tengo controlada.- dijo en tono suave y acercandose lentamente a Aome.

Aome sintió las grandes manos de Yako en su cuello y abdomen, el tacto entre ellos se volvió tan cercano que ella sucumbió a aquel demonio perro, bajo la guardia y fue ahí que Yako volvió a tener el control de Aome.

Mientras en la celda de Kikyo, estaba Inuyasha conversando con ella.

-Ya no eres nada de lo que yo recuerdo, te has vendido, has alcanzado tu sueño, pero has sacrificado demasido, me das lastima.- hablo Kikyo con lágrimas en sus ojos.

-No sabes de lo que hablas, mi hermano me dió el lugar que me corresponde, me ayudó a ser más fuerte. Ahora tu poder pasará a ser de el, y así nada nos detendrá.- hablo con seriedad.

Kikyo abrió los ojos, estaba tan sorprendida que no pudo continuar con la conversación, cerró los ojos en señal de resignación, se sentía muy infeliz ya que está vez no podría hacer nada.

Yako tenia de nuevo el control de Aome, y está vez fue más cuidadoso, colocando una hermosa gargantilla con una luna llena negra en su cuello.

-Mi amada Lady, si intentas escapar, o cualquier cosa, no dudaré en hacerte sucumbir ante el dolor, debes de entender que eres mía, y no harás nada que yo no te autorice.- dijo con una sonrisa en su cara.

Aome perdió el brillo en sus ojos, estaba bajo el efecto del poder de Yako, las cosas habían empezado a empeorar, los chicos habían echo todo lo que pudieron, pero no fue suficiente.

-Listo maestro, la vasija está rota y el poder flota por ser controlado, desea algo más?- cuestiono Inuyasha.

-Vamos, tengo que decirle algo importante, Aome sígueme.- ordenó Yako.

Inuyasha iba detrás de ellos, guardando distancia, mientras que Aome estaba abrazando el brazo de Yako, al llegar Kikyo los miro aterrada.

-Seras drenada de tu poder, y serás una simple humana, me apiade de ti y volverás a la vida.- dijo con una sonrisa en su casa.

-Muchas gracias maestro Yako - dijo Inuyasha se rodillas.

-Iras.con mi hermano al castillo del Norte, pero antes el te pondrá esto.- Yako mostró una gargantilla cómo la Aome.

-Este objeto te hará sumisa ante Inuyasha, si desobedeces una orden sufrirás un castigo.- dijo serio.

Yako tomo el poder de Kikyo en sus manos y al absorberlo su cuerpo palpitaba, una sonrisa de completa satisfacción está en su cara, su altura aumento, y su poder.

-Esto es demasiado excitante, ahora yo seré el rey supremo de los puntos cardinales.- dijo altanero.

Yako se concentro y señaló a Kikyo para que ella comenzará a flotar y ser cubierta de una luz rosa, y está luz le devolvió la vida.

-Siempre cumplo mis promesas, ahora tu debes obedecerlo en todo, has regresado de la muerte.- dijo con voz suave.

-Muchas gracias maestro Yako, estoy en deuda con ustedes.- Inuyasha estaba de rodillas.

Kikyo estaba sorprendida, no sabía que Yako pudiera hacer eso, ahora tenía que hacer todo lo que Inuyasha le dijera para conservar su vida.

Continuara.....

Es corto lo sé... Pero el siguiente será más largo.....

No abra adelantos, todo será sorpresa.....

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Nos leemos 💖💓