La hermana de mi mejor amigo

Capítulo 19: La Desolación

AIZAWA

Pasaron un par de horas desde que Hoshi se había quedado dormida y yo acababa de despertar, era relativamente temprano al menos no era de madrugada, solo miraba el techo descansando y acomodando a mi muñequita en mi pecho, era un verdadero deleite el verla descansar. Escuche su celular recibiendo una llamada la cual me asusto un poco, alcance el celular tratando de ser lo más sigiloso y cuidadoso posible para no despertarla mi plan original era colgar la llamada, pero accidentalmente mi pulgar sujeto el celular justo por el botón de contestar.

- ¡HOSHI! ¡MI REYNA! ¡Otra vez yo tu super agente estrella! – La voz de un hombre increíblemente aguda y chillante para su género sonaba estruendosa, despertando a Hoshi prácticamente de inmediato de un susto. - ¡Escucha bombón las nueva buenas! Primero, ya cerré contrato con la televisora para el programa voy a necesitar que viajes lo antes posible a la isla de Kyushi, ahí es donde se estará grabando el programa quieren una temática tropical para inaugurar y hay que empezar a grabar lo antes posible, no te preocupes por nada, ya contraté a un dermatólogo para que cuide de tu bella piel, no me arriesgare a que te quemes como camarón, ¡Ah también te quería decir! Ya tenemos a los otros seis prospectos solo falta el tuyo por cierto tu vuelo sale en tres días te mando todo por whats, ¿Oky? –

¿Un viaje? ¿Qué programa? ¿Qué carajos estaba diciendo?

- ¡Excelente no hay dudas! Me encanta que seas tan lista, bueno espera mi mensaje, bye bye – Y así como hablo solo por toda la llamada con rapidez y extravagante, de la nada colgó, santo cielo era peor que Mic en nivel de extrovertido.

Yo seguía con miles de preguntas en mi cabeza, pero era mas que obvio lo que sucedía, ella se iría por quien sabe cuanto tiempo esta vez, no sabia ni siquiera si regresaría, ¿Qué ya había cerrado el contrato? Significa que ella ya lo sabía, sentía un gran vació en mi pecho, ¿Qué significaron estas semanas? ¿Y mi confesión de amor eterno? Que yo no la había dejado de amar desde que éramos adolescentes, aun sabiendo que ella se iría decidió seguir mi corriente, no darme un cortón de golpe, me convirtió en un juguete más...

En todo este tiempo ella me miraba, creo que ya sospechaba lo que se venía, ¿Una pelea? ¿Debería gritarle? ¿Cuándo carajos pensaba decirme? Aparentemente cuando ya tuviera sus maletas en la puerta, abandonarme igual que a un perro, pff ¿Qué fue esa estupidez que pensé de "confesión de amor eterno"? Si el amor de verdad pudiera detener a las personas nos hubiéramos quedado juntos hace quince años atrás...

- Shota... -

Pronuncio mi nombre en un susurro, antes me hubiera sentido en el cielo, pero en estos instantes solo era un desgraciado más, no, era el mismo desgraciado que había sido durante quince años, ella parecía querer decir algo, pero no le di tiempo para ello, me levante de la cama tome mi pantalón y camisa por fortuna ya tenia mis boxers puestos rápidamente me fui a la salida de su habitación, abrí la puerta y la cruce pero antes de cerrarla, solo le dije

- Ten un buen viaje –

Llegue a mi habitación sin pena ni conflictos y recargue mi espalda contra la puerta una ve adentro. Aagg ¿Qué más podía decir? Tenia mi mano en mi frente y la otra aun con mi ropa me abrazaba a mí mismo, como había podido ser tan infantil ¿En qué momento había dejado de importarme el universo y nuestras situaciones por el simple echo de expresarle todo mi amor? ¿En qué momento me percaté que estaba tan solo que al verla decidí arriesgarlo todo y decirle? Creo que fue en el momento que me enteré de que regresaba a Japón... ¿Cuándo me perdí a mi mismo? Quizá lo hice por no poderla detener hace quince años, yo, apenas estaba iniciando mi carrera como héroe profesional... ella había sido seleccionada para ese estúpido proyecto de espionaje de la comisión.