Toni Gambino ~London~

Capítulo 7. Presente

Narra Toni:

Me tapo la cabeza con la manta por el ruido insistente de mi móvil. Cuando suena otra vez gruño contra la almohada, pero decido agarrarlo y responder.

-Sea quien seas espero, de verdad espero, que sea importante —murmuro aún con los ojos cerrados—

-Te dije que me llamaras cuando dejases de estar ocupado —mierda Olivia...—

-Eh, me dormí. Se me olvido, lo siento. —ya empezaba a trabarme como un imbécil y a que se me acelere el corazón—

Respira Toni...

Cálmate.

-Bueno, no pasa nada. Quería verte un rato, pero Hai me dijo que quería hacer una reunión con todos.

-¿Contigo también? —le pregunte extrañado—

-Si, así que en un rato tenemos que estar en mi ático del casino. Nos vemos.

Colgó antes de que pudiera contestar.

Perfecto, lo que me faltaba.

Me levanto con un dolor de cabeza descomunal. Ya no bebo más...

Me meto a la ducha y me visto con un traje sencillo sin corbata.

Cuando estoy listo cojo las llaves del coche y me dirijo hacía el casino.

Hai me envió un mensaje de que nos veríamos ahí, a saber de lo que querrá hablar ahora.

Cuando llego no hace falta ni hablar con él recepcionista, ya me conoce de la otra vez y me deja pasar hacia el ascensor.

Cuando estro al ático me dirijo al salón y la veo sentada en el sofá.

- Eres el primero — dice Olivia con una sonrisa —

Asiento con la cabeza mientras le doy una sonrisa de boca cerrada.

Y ¿Ahora que me pasa? Me había repetido que pasara página y ahora no puedo ni hablar con ella.

- ¿Quieres una copa? — señala el vaso de whisky que hay sobre la mesa —

- Si, no, osea eh... ¿Tienes café? — mierda mierda mierda —

Asiente con una sonrisa burlona.

Cuando uno de los guardaespaldas se va para traerme un café, me giro hacia Olivia.

- ¿Cuando llegan? Están tardando mucho. — intento sacar conversación e intentar quitarle esa estúpida sonrisita que me idiotiza —

- ¿Quienes? — su sonrisa se ensancha —

¿Como que quienes? ¿Es que se le ha olvidado la reunión?

- Hai, Jose... Nose, tú me llamaste para que venga.

- Ay... ¿Te dije reunión con Hai? Quería decir, tomar un café o una copa conmigo, lo siento... Que despistada.

Me dedica una sonrisa inocente. Al verla a mi también se me escapa una sonrisa.

Suspiró y me relajo completamente, apoyando la espalda en el respaldo del sofá y estirando mis piernas.

- Un despiste... Claro... — le dedico una sonrisa torcida —

Me hubiera ido hace rato ya, pero no quiero. No me siento como ayer, no me siento incómodo ni nada parecido.

Veo que le dedica una mirada a los guardaespaldas y ellos se retiran de la sala. Cuando siento que se acerca a mí me giro.

- Lo siento por lo de ayer — frunzo el ceño por la confusión — por si te sentiste incómodo.

- No te preocupes, tenía un día malo.