El Agente Ornitorrinco

Capítulo 13: Un nuevo agente en práctica

Le había tomado trabajo que lo aceptaran nuevamente en la O.S.B.A. debido a los problemas que tuvo con servicios sociales. Aun si tuvo que prometer que no volvería a haber problemas con eso y si así fuera, aceptaría ser echado.-"Todo fue culpa de ese entrometido pato."-pensó el científico malhumorado.- "¿A quién no le gustan los chistes de patos?".-Pero dejando ese tema de lado, ingresar como agente fue relativamente fácil, ya que fue criado por los ocelotes, además de haber contribuido a detener a M.E.R.M.E.L.A.D.A. en uno de sus planes más difíciles.

Aun así, al recordar las palabras de Monograma lo hicieron enojar un poco.-"Eres un agente en práctica, todavía no eres un agente de verdad".-Esas duras palabras de monograma lo fastidiaron. Al parecer, como agente de práctica aun no podía ir a misiones como lo había hecho antes. La primera vez que ingreso, no habían muchos agentes por lo que pudo ir a misiones, pero ahora era necesario completar un entrenamiento completo. De alguna forma, creía que Monograma lo molestaba con ese "entrenamiento "solo porque destruyo su auto por accidente.

El sonido de silbato lo sacó de sus pensamientos rápidamente. Todos lo demás agentes en práctica, que estaban formados en la fila comenzaron a avanzar en el campo de entrenamiento. Era un campo con varios tipos de obstáculos a recorrer en un tiempo límite. El silbato siguió sonando pausadamente mientras cada agente se adentraba al campo.

Impacientemente esperaba su turno dando pequeños saltitos en su lugar hasta que finalmente llego su momento. Avanzo rápidamente hacia el primer circuito, comenzó escalando una red de cuerdas colgado desde muy alto. Era bastante difícil ya que la red se movía de un lado a otro, por lo que detuvo un momento para recuperar el equilibrio.-No mires abajo, no mires abajo...-comenzó a decir repetidas veces para calmarse.

Por otro lado, Perry el ornitorrinco caminaba por los pasillos de la O.S.B.A para llegar al campo de entrenamientos de los agentes. Sinceramente, lo primero que pensó es que ese campo de entrenamiento era mejor que en el que entreno él. Obviamente, como descubrieron que la organización tenía más presupuesto, invirtieron en mejores equipos. Lo segundo que vio -y a lo que realmente fue a vigilar- fue a Doofenshmirtz a lo alto de un obstáculo, y que al parecer no se movía. Por alguna razón, Monograma volvió a pedirle que Doof estuviera a su cargo, aunque en este caso solo le pidió que estuviera vigilado. Perry se apoyo en el umbral de la puerta de entrada mientras observaba al científico.

Ya le había ocurrido esto una, bueno, dos veces, cuando se había decidido hacer su prueba de valentía y convertirse en hombre al saltar a la piscina publica en su pueblo. La única diferencia es que aun no miraba hacia abajo y no planeaba hacerlo. Estaba consciente de que estaba bastante alto, tanto como ese maldito trampolín, pero si no lograba pasar por los obstáculos no se convertiría en un agente de verdad. Respiro hondamente antes de continuar con el obstáculo sin pensar demasiado. Avanzo lo más rápido que pudo hasta llegar abajo, una vez completado el obstáculo, sintió un gran alivio aunque aun le faltaba el resto del circuito, pero francamente pensó que el que acababa de pasar era el peor.

Continuó avanzando por un terreno en bajada con una variedad de neumáticos. A lo lejos Perry observaba como Doof pasaba por el terreno alternando las piernas para no caer. Aunque no cayo, estuvo a punto de hacerlo varias veces. Luego, se adelanto hacia un obstáculo donde tenía que avanzar a ras de piso.

Perry se sorprendió al ver como su ex enemigo era capaz de superar esos obstáculos, después de todo sabía que no tenía la mejor condición física del mundo, y aunque sobrepasaba las pruebas de una forma torpe, quedo impresionado.

Doof llego a unas barras suspendidas sobre una capa de lodo. Se sostuvo de la primera barra sin problemas, sin embargo no logro alcanzar la segunda. Cuando estaba por cogerla su otro brazo temblaba por el esfuerzo hasta que finalmente se soltó y cayó sobre el lodo tan fuerte que el sonido retumbo en toda la habitación. Cuando el eco del sonido se termino de disipar, solo se escucho las risas de una hiena que se esforzaba por no reírse, debido a la situación.-Quisiera ver que lo hicieras mejor...-le dijo Doof a la hiena pasando a su lado cubierto de lodo.